La última parada. El último compromiso. El telón de la Copa Federación se abrirá este sábado, y al escenario saltarán los dos países que más fuertes se han erigido en este curso. República Checa y Alemania, que nunca antes se habían visto las caras en una final de la Copa Federación, pugnarán por suceder a Italia en el trono. Partiendo como locales, las tenistas dirigidas por Pala asumirán el papel de favoritas en la búsqueda de su octava ensaladera. Alemania, sin embargo, tratará de saborear sensaciones casi desconocidas, tras veintidós años sin alcanzar la última ronda.
Dominio histórico checo
Pese a que sendos capitanes hayan reconocido que será una eliminatoria de lo más igualada, es inevitable pensar que la balanza, antes de la final, está algo inclinada en favor de las checas. Como locales, el O2 Arena de Praga es un territorio tremendamente cómodo para Kvitova, número uno checa, que será quien cargue a la espalda la mayor responsabilidad. Además, la historia avala a la antigua Checoslovaquia, que busca ya su octava ensaladera. En el presente, nada que envidiar.
En un panorama dominado por Italia y Rusia, el equipo de Pala ha arrasado con todos sus rivales en dos de los tres últimos años. Alemania, en cambio, tiene que remontarse a la época de Steffi Graf para recordar un título. Exactamente 22 años llevan las tenistas ahora capitaneadas por Rittner sin ganar una ensaladera. Quince años sin alcanzar una última ronda. Esa parece ser su principal baza, el hambre. Y por supuesto, la talla de sus tenistas. Petkovic, una de ellas, afronta la cita lanzada tras alzarse con la victoria en el Masters de Sofía.
Camino checo la final
Sin Kvitova y con la tierra batida como superficie, la República Checa tuvo que sufrir en exceso ante una España que se agarró al buen momento que atravesaba Carla Suárez. A pesar de disputarse en Sevilla, la climatología fue protagonista. La canaria impuso su paciente juego, tumbando en dos rápidas mangas a Safarova, en el que sería el único partido del fin de semana. La lluvia entró en escena y los partidos se aplazaron a un lunes frenético. Zakopalova se exprimió con dos partidos consecutivos. Ganó a Torró, y cedió ante Carla. Con 2-1 en la serie, las españolas no supieron cerrar la eliminatoria. Safarova, y después Hlavackova y Zahlavova, dieron el acceso a semifinales a su país.
Mucho más asequible para las checas fue la penúltima ronda. Italia, a pesar de haber dominado los últimos años, no obtuvo protagonismo sobre el cemento. Errani y Giorgi, temibles en otros escenarios, no pudieron hacer frente a unas enchufadas Kvitova (dos victorias) y Safarova. La misma dupla que ante España saltó a escena para poner la guinda al pastel (4-0), hizo lo propio para evidenciar las serias opciones de su equipo en la próxima final.
Camino alemán a la final
El calvario ha terminado. Abocadas a luchar por el ascenso la temporada pasada, las tenistas alemanas han pasado de estar en el Grupo Mundial II hace un par de cursos, a pelear por lograr una hazaña que parecía impensable. Sin embargo, la unión y la confianza de un núcleo fuerte está facilitando el cumplimiento de esa quimera.
En este 2014 el rumbo del país europeo no podía haber sido mejor. Pese a la complejidad de sus rivales, Eslovaquia y Australia, las alemanas se impusieron con cierta comodidad (3-1 en cada serie). Algo confusa es la equidad de la primera eliminatoria, pues los tres partidos individuales que cayeron del lado germano estuvieron tremendamente igualados. Sobre todo el trascendental primer encuentro, en el que Petkovic tuvo que hacer frente a una bola de partido. Al final, tres victorias individuales (dos Kerber) y una única derrota en el dobles.
Ante Australia el equipo de Rittner volvió a mostrar sus armas. De la mano de una estelar Kerber, el equipo cerró su acceso a la final sin ceder un solo partido en individuales. La connotación negativa una vez más la pusieron Goerges y Groenefeld, que con la eliminatoria sentenciada fueron incapaces de sumar una victoria.
A continuación podrán disfrutar de un exhaustivo análisis de los dos equipos