Andy Murray nunca ha ganado en Australia, ya que en las tres anteriores perdió una ante el suizo Roger Federer en 2010 y las otras dos contra el serbio Novak Djokovic en 2011 y 2013. El escocés quiere quitarse la mala racha australiana y lograr su primer entorchado.

"Al final del primer set comencé a ser más agresivo"

Conseguir llegar a una cuarta final en el Abierto de Australia es algo que enorgullece a Murray. "Alcanzar cuatro finales en el Abierto de Australia no parece mucho. Pero estando rodeado de personas como Roger, Novak y Rafa, es un logro que no sucede muy seguido. Por eso me siento muy orgulloso", comentó en rueda de prensa.

Que su ex entrenador sea ahora el de Berdych no le influyó en ningún momento, ya que Andy está muy contento con Amelie Mauresmo. "Mucha gente la criticó al final de la temporada pasada porque decían que la forma como estaba jugando era su culpa. Y apenas llevaba dos semanas entrenando con ella. Tú no puedes cambiar cosas durante los torneos y hubo poco tiempo de compartir en ese entonces. Por eso no había razón para juzgarla. Estoy muy feliz por ella después de haber ganado en semifinales", afirmó.

Para terminar, Murray explicó como había sido su adaptación al partido frente al tenista checo. "Al principio me sentí un poco defensivo. Sólo hasta el final del primer set empecé a ser más agresivo y luego eso lo extendí para empezar el segundo set", concluyó.