Veinte minutos duró la batalla que planteó Víctor Estrella Burgos ante David Ferrer. El dominicano, que jugó la baza del todo o nada, se vio abocado a retirarse cuando se encontraba 6-4 y 2-0 perdiendo. El inicio fulgurante y cargado de intensidad del número 55 del circuito, que incluso consiguió quebrar el servicio del alicantino, fue sofocado por el quinto cabeza de serie que comenzaba a encontrarse consigo mismo. A partir de ese punto de inflexón, el partido no tuvo historia. Ferrer avasalló a su adversario y éste, acusando desde el comienzo dolores en el hombro, se vio obligado a retirarse de la pelea.
Precoz final de una batalla prometedora
Desde los compases inciales los gestos de dolor de Víctor Estrella fueron ostensibles. Golpe tras golpe, el dominicano se llevaba la Víctor Estrella mostraba gestos de dolor en el hombro derecho desde el inicio. Tras el cuarto juego, llamó al fisioterapeutamano al hombro derecho. A pesar de las molestias, fue capaz de firmar un inicio brillante tras el cual se colocó 2-1 arriba y saque para confirmar la rotura. Pero Ferrer y la casta que lleva por bandera, volvieron a igualar las tornas. Tras perder este cuarto juego, Víctor Estrella llamó al fisioterapeuta para tratar de poner fin a su lesión.
Pero no fue así. De más a menos, la llama del dominicano se fue apagando paulatinamente y Ferrer, que no mostró un ápice de compasión, desató el vendaval. El alicantino se anotó la primera manga 6-2 sin más dificultades que las iniciales y encarriló la segunda, tras conseguir un tempranero break y la confirmación en el juego posterior. Siete juegos seguidos del de Jávea precedieron a la bandera blanca de Víctor Estrella, que se despedía de Mónaco con signos evidentes de dolor y decepción, pero ante una merecida ovación del respestable por el nivel desplegado al comienzo del encuentro. La prometedora batalla que iban a librar dos especialistas sobre arcilla, tuvo un final precoz.