Sin sufrir en el segundo set Carla Suárez conseguía acceder a la tercera ronda de Roland Garros gracias al abandono de Virginie Razzano, algo que le daba más tiempo para descansar de cara a su próximo partido y unos juegos que no tenía que disputar, ahorrándose el cansancio propio que da jugar tanto en tierra batida como en el torneo parisino.
"Me hubiera gustado jugar un poco más para ver si cambiaban mis sensaciones, pero me beneficia muchísimo haber acabado antes"
El abandono de Razzano hacía que Carla pasara fácilmente a la siguiente ronda, aunque no estaba contenta de haber tenido que jugar en el cuarto turno. "No es fácil jugar en un cuarto turno, no sabes a que hora vas a entrar en pista y pasas muchas horas muertas en el club. Además, contra una rival local, en la pista central, son pequeños detallitos que ha hecho que de sensaciones no he estado como en otros partidos o en torneos anteriores, pero es importante adaptarse a esas sensaciones", comentó ante los medios.
Para terminar, Carla Suárez ya sólo piensa en la italiana Flavia Pennetta, a quien sabe que le será muy difícil conseguir imponerse. "Nos conocemos bien, hemos jugado varias veces en los últimos años, le gusta jugar en tierra, tiene golpes ganadores y sabe defender si lo necesita, luchar, hacer partidos largos y es muy completa. Para las dos será un partido bonito por el sitio, nos tenemos mucho aprecio mutuamente, va a ser un partido mentalmente bastante duro porque nos conocemos bastante", concluyó.