Carla Suárez, actual número nueve en el ranking WTA aterriza en Londres con ilusión y ganas de brillar con luz propia en la capital británica. Jugar sobre hierba no es su fuerte, lejos de potenciar sus cualidades tenísticas, a su lado tendrá su garra y confianza para equilibrar la balanza.
Hierba superficie restringida
Carla llega con poca aclimatación a la superficie. Con un balance de tres partidos sobre pasto en 2015, en el torneo de Birmingham, con dos victorias y una derrota ante Karolina Pliskova, el nivel de la tenista canaria en esta edición de Wimbledon es todo una incógnita. El Grand Slam británico ha reportado pocas alegrías a Carla en particular y al tenis español en general. Un bagaje de siete victorias y cinco derrotas en cinco participaciones para Carla.
Partido a partido para coger sensaciones
Unos octavos de final en 2013 sigue siendo la meta a coronar o quién sabe si a superar. 2015 tiene la llave. El año de Carla puede ser calificado de brillante. Tres finales (Amberes, Miami y Roma), solidez, instalación en el top ten, en definitiva, la temporada de instaurarse entre las más grandes del panorama internacional. Tras un Roland Garros que dejó un mal sabor de boca, Wimbledon puede ser la cura.
Servicio y fortaleza mental imprescindibles
Clave en el devenir de Suárez en el Grand Slam londinense será su gran asignatura pendiente, el servicio. En el torneo donde más se premia un buen servicio, el saque de la tenista canaria deberá rendir como nunca, gran porcentaje de primeros servicios y muy variados para suplir la falta de potencia y poder dominar sobre el pasto.
Otro de los factores decisivos será la fuerza mental. El poder luchar de tú a tú con las más grandes, el sentirse con posibilidades será clave en las aspiraciones de Carla. Para poder competir en un terreno que no es el suyo la primera que deberá creerlo sera ella misma.Tenis tiene de sobra. Las finales perdidas en este 2015 no deben pesar como una losa, deben servir como parte más del aprendizaje. Sharapova, Serena, Kvitova no están tan lejos aunque la superficie no acompañe.
Cuadro complicado desde el comienzo
Sorteo poco benévolo para los intereses de Carla. Mladenovik, una experta en la superficie podría ser la primera prueba de toque en una hipotética segunda ronda. Tenistas de la talla de Azarenka, Ivanovic, Sharapova o la favorita Serena Williams podrían cruzarse en el camino de Carla a lo largo del torneo. La gran canaria necesitará salir desde el principio al 110% si quiere competir con estas colosas de la raqueta. Siete victorias le separan de la historia.