Florianópolis y Bakú cierran sus puertas hasta el año que viene, y las cierran viendo ganar a unas primerizas. Margarita Gasparyan, 20 años, ha levantado en Bakú el primer título de su carrera deportiva. Mientras, Teliana Pereira, de 27 años, hacía lo mismo en Florianópolis tras conseguir meses atrás el título en Bogotá.

Teliana Pereira, profeta en su tierra

La primera en hacerlo era la brasileña Teliana Pereira ante su público. La jugadora clasificada en el puesto 78 del ránking WTA se deshacía de la alemana Annika Beck en dos horas y 36 minutos de partido. Tras ganar el torneo WTA disputado en Bogotá hace unos meses y el reciente título en Florianópolis, la jugadora brasileña entrará en el "top 50" la semana que viene.

Con el público a su favor, la tenista nacida en Curitiba se adjudicaba el primer set y hacía soñar a sus compatriotas, quienes ya veían como esa sequía que tantos años duró en el tenis femenino brasileño iba a tocar a su fin. Pero enfrente estaba la alemana Beck, que no había dicho su última palabra. La tenista alemana dejaba claro con un break nada más comenzar la segunda manga que el partido no iba a ser un camino de rosas para la brasileña. La alegría duraba poco puesto. Pereira pronto mostró el buen tenis desplegado a lo largo de la semana y recuperaba esa desventaja que le permitía igualar el marcador. Pero otra vez más, Annika Beck iba a romper el saque de su rival para llevar el partido al tercer y definitivo set.

En este último set, el público local supo jugar su papel. Las palabras de aliento hacia su jugadora provocaron una reacción en la misma que dificilmente Beck supo parar. Teliana Pereira se adjudicaba el torneo WTA de su país, segundo de su carrera.

Gasparyan encuentra el dulce sabor de la victoria

A más de 11.000 kilometros de distancia de Florianópolis, los amantes del tenis femenino recibían una grata noticia. La rusa Margarita Gasparyan, de tan sólo 20 años, derrotaba a la joven Patricia Maria Tig y se hacía con su primer título WTA, tras deshacerse de su rival en tres sets (6-3, 5-7, 6-0) y más de dos horas y media de partido.

El público desplazado hasta Bakú iba a asistir a una final de dos jóvenes promesas del tenis femenino. La rumana Patricia Maria Tig, que llegaba a la final desde la fase previa, y la que iba a proclamarse campeona, Margarita Gasparyan. El partido estuvo reñido durante los dos primeros sets, primer parcial para la rusa, segundo para la rumana, puesto que el tercero fue un paseo militar para Gasparyan. Margarita ya hace soñar al tenis ruso a su temprana edad y se coloca como digna sucesora de Maria Sharapova para un futuro.