No será Mardy Fish la única leyenda a la que se homenajeará en Nueva York. Hace meses, Lleyton Hewitt anunció que se retiraría en el Abierto de Australia de 2016, produciéndose esta temporada su despedida de los otros tres Grand Slam. No pudo acudir a Roland Garros, pero sí lo hizo en Wimbledon, donde protagonizó un gran encuentro ante Nieminen, y se vivieron escenas de gran emotividad tras su derrota.

El australiano ganó el torneo en 2001, venciendo a Sampras en la final

Hewitt ha dado muestras de seria mejoría tras caer en Londres. Siendo clave para que Australia accediera a semifinales de Copa Davis, el australiano jugó bien en Washington, donde a punto estuvo de vencer a Feliciano López. Acudirá pues, con un buen rodaje a Nueva York, y con muchas ganas de despedirse dando el máximo sobre la pista, como siempre lo ha hecho.

La organización del Us Open supo percibir el gran atractivo que suponía para el torneo, contar con el de Adelaida. Debido al convenio existente entre Grand Slam para otorgar wildcards a jugadores de los países organizadores de un major, el Us Open no dudó en dar a Hewitt la correspondiente a la federación australiana. En lo que concierne al tenis francés, el agraciado ha sido Pierres Hugues-Herbert, actual 139 del ránking.

Pierres Hugues-Herbet. Foto: zimbio

Savia nueva estadounidense

Las seis wildcards restantes para el cuadro principal, fueron otorgadas a jugadores estadounidenses jóvenes y con proyección. Sigue buscando con ahínco la federación del país de las barras y las estrellas, un nuevo referente en su tenis que rompa con una de las peores épocas del mismo. Los seis jugadores que disputarán el cuadro final debido a estas tarjetas de invitación son:

Austin Krajicek: 25 años y 113 del mundo. Tan solo ha disputado un encuentro de fase final de Grand Slam, y fue en el Us Open del año 2008, cayendo ante Agustín Calleri. No parece tener opciones de mejorar mucho más su nivel, tomándose como reto entrar en el top100.

Ryan Harrison: 23 años y 126 del ránking. La gran promesa frustrada, el juguete roto del tenis mundial. Llamado a estar entre los mejores del mundo, su progresión se cortó abruptamente hace años. Víctima de la presión y su incapacidad para corregir defectos, Harrison vaga por las pistas de medio mundo ante la mirada condescendiente de los aficionados.

Ryan Harrison. Foto: atpworldtour

Bjorn Fratangelo: 22 años y 106 del mundo. Sus buenos resultados en torneos Challenger este verano, le han hecho subir muchas posiciones en el ránking. Finalista en Caltanisseta y Binghampton, el estadounidense está en el mejor momento de su carrera, y puede dar guerra auspiciado por el público.

Ryan Shane: 21 años y 1400 del ránking. Será su debut en un Grand Slam. No acumula partidos en torneos ATP, pero viene de ganar el campeonato universitario estadounidense, lo que da un gran prestigio, y le convierte en foco de todas las miradas.

Jared Donaldson: 18 años y 153 del mundo. Es una de las grandes promesas del país de las oportunidades. Su progresión va sin prisa pero sin pausa. Ha disputado un partido de Grand Slam en toda su carrera, y lo hizo ante Gael Monfils el año pasado en Nueva York, dando buenas sensaciones.

Frances Tiafoe: 17 años y 271 del ránking. Es la gran perla del tenis estadounidense. Muchas son las esperanzas depositadas en este jugador, que parece tenerlo todo para triunfar. Número dos del mundo en el circuito junior, ya debutó en Roland Garros ante Martin Klizan. Habrá un gran ambiente en el encuentro que dispute.

Además de las tarjetas de invitación para el cuadro principal, también se repartieron las correspondientes a la fase previa. Los agraciados fueron los siguientes: Taylor Fritz, Stefan Kozlov, Mitchell Krueger, Marcos Giron, Michael Mmoh, Reilly Opelka, Tommy Paul y Noah Rubin. Todos jugadores estadounidense jóvenes, con mucha proyección y buenos resultados en el circuito júnior.