Darle la oportunidad de debutar a jóvenes locales que están intentando despuntar en el circuito, puede salir mal si la intención es que se disfrute de un partido bonito y que el público se vuelce con la tenista promesa; ya que hay ocasiones, en las que se acaba viendo un encuentro descafeinado, donde destaca solamente una de las jugadoras en pista.
Demasiada diferencia en el ránking
Jamie Loeb, nº413 del ránking en la actualidad, (gozó de su mejor puesto en septiembre del 2013, el 353) apenas había competido esta temporada en siete torneos. En este par de meses de competición, consiguió levantar un torneo ITF en su país. Por su parte, la danesa, semifinalista en New Haven (la semana pasada), salió muy tranquila, sin acusar la presión de defender una gran cantidad de puntos, que la sacarían directamente del top-ten. La natural de Odense apenas tuvo que sudar para doblegar a una jugadora carente de golpes potentes para desarbolarla.
Clave con el servicio
Wozniacki, debido a la gran superioridad reflejada dentro de la pista, no necesitó brillar con su juego. Se limitó a sacar con contundencia (88% de puntos ganados con el primer servicio) y de mover a la joven americana con sus golpes. Muchos errores no forzados (un total de 17) llevaron a Loeb a perder el primer parcial por (6-2), un set en el que Caroline estuvo demasiado a la expectativa esperando el error de su rival.
Mejoría de Wozniacki y rosco a la vista
Reducir los errores infantiles y ser algo más agresiva a mitad de pista, llevaron a la finalista de la pasada edición a apuntarse la segunda manga por 6-0.
Loeb no gozó de ninguna pelota de rotura en todo el encuentroApenas sus tres errores no forzados; obligaron a Jamie a arriesgar sin ningún acierto. Los fallos se acumularon hasta llegar a un máximo de 28 por diez de su rival.
El 45% de puntos ganados con primer saque fue uno de los mayores lastres de la estadounidense. Los servicios no llevaban mucha potencia pero tampoco una excesiva colocación. La danesa llega a la maldición de la segunda ronda de esta temporada, en la que cayó en el Open de Australia (v Azarenka) y en Roland Garros ( v Goerges) Su próximo escollo será la ganadora del encuentro entre McHale y Cetkovska.