Todo esfuerzo tiene su recompensa. Eso habrán de pensar las cuatro selecciones nacionales que han obtenido el billete para disputar el Grupo I de la Copa Davis en 2016. Algo más que subir una división supone este hecho para muchos de estos países, que ven cómo el tenis puede suponer un vehículo de integración social, y cómo el hecho de atraer la atención de la población local puede repercutir en la formación de nuevos jugadores y una mejor financiación.

Para unos esto ya supone un sueño hecho realidad, mientras que otros países aspiran a seguir ascendiendo, percibiendo el Grupo I como una mera antesala hacia la gloria: alcanzar el Grupo Mundial. Por el momento toca celebrar la gesta, mientras que otros se rasgan aún las vestiduras ante la oportunidad perdida.

Portugal 3-2 Bielorrusia

No se puede pasar por alto un descubrimiento y una gran noticia, y no está referida al equipo ganador. En Bielorrusia se destapó un jugador de apenas 23 años, que sorprendió a todos al derrotar en el primer partido a Joao Sousa, y hacer que saltaran las alarmas en el combinado luso.

Siendo el 302 del mundo, Egor Gerasimov dio una de las mayores campanadas del fin de semana, al remontar un resultado en contra de 6-0 6-1 ante Joao Sousa, número 48 del ránking ATP. Ver para creer. Nada podía hacer presagiar este hecho, que el buen hacer de Gastao Elías dejaron en anécdota.

El revolucionario Gerasimov no fue suficiente para dar la sorpresa

Y es que Elías pudo con Ignatik cuando el estupor aún inundaba el Club de Tenis de Viana, sede de la eliminatoria. 6-3, 7-6 (3) y 7-5 fue el marcador final, igualando el tanteador y dando cierto aire a Portugal. Un aire que aprovecharon en el dobles, con un Elías que hizo un trabajo psicológico importante, animando en todo momento a un Sousa aún desolado por la hecatombe que había protagonizado el día anterior. En cinco sets se resolvió el encuentr que marcó el devenir de la eliminatoria.

Joao Sousa y Gastao Elías en Copa Davis. Foto: daviscup

Sousa pudo redimirse en el cuarto punto, al apabullar a Ignatik por 6-1, 6-1 y 6-4, despejando viejos fantasmas y reconciliándose con el público y consigo mismo. Portugal asciende de categoría aunque con más problemas de los esperados. Gerasimov completó su actuación estelar venciendo en el intrascendente quinto partido a Machado.

Bulgaria 2-3 Hungría

La eliminatoria estaba perdida antes de empezar. Al menos eso traslucía la actitud de prensa, aficionados y federación local, que se mostraban desolados ante la negativa de Grigor Dimitrov a disputar esta vital eliminatoria. El de Haskovo generó un sismo en la opinión pública búlgara, que se intensificará ahora tras la eliminación.

La ausencia de Dimitrov no pudo ser superada

Era la gran oportunidad de Bulgaria de ascender, pero Kutrovsky, mejor jugador del equipo, no supo responder a la presión y cayó derrotado en el primer encuentro ante Peter Nagy, por 6-4, 6-0 y 6-3. Una losa que hundió aún más a los locales, siendo ése partido el más factible para sus intereses.

Fucsovic cumplió y ganó sus dos encuentros, haciendo valer el hecho de que fuera el jugador con mejor ránking de la eliminatoria (234 de la ATP), neutralizando así el buen dobles que formaron Grozdanov y Lazov, y que mantuvieron con vida a los búlgaros hasta el domingo.

Chile 5-0 Venezuela

Emotividad a raudales en la eliminatoria disputada en Santiago de Chile. Con el país aún en alerta y consternado ante el terremoto que sacudió la zona apenas unas horas antes del inicio de los partidos, los jugadores chilenos se vieron espoleados y practicaron un juego sólido y sin fisuras.

Venezuela no fue capaz de lograr ganar ni un solo set

Superioridad aplastante y concurso de los cinco jugadores convocados. Chile culmina en año 2015 en Copa Davis con un balance de 15-0 en victorias-derrotas. Algo de una dificultad enorme, y que para entenderlo hay que tener en cuenta la magnífica labor realizada por Nicolás Massú como capitán del equipo andino.

Christian Garin en Copa Davis. Foto: daviscup

Lama, Podlipnik-Castillo, Garín, Saez. Daba igual quien jugara. Parecían estar poseídos por un poder sobrehumano que les hizo flotar sobre la pista, y practicar un tenis de alto nivel. Chile logra el ascenso por la puerta grande, y ésto puede suponer un incremento de la actividad tenística en este deporte, así como mayores inversiones y buen futuro de jóvenes promesas.

Pakistán 3-2 China Taipei

¿Puede el número 1177 del mundo erigirse en héroe de todo un país? Aisam Qureshi tiene la respuesta, y es un contundente "sí". El veterano y afamado jugador de dobles, se lanzó a la aventura en el quinto y definitivo punto de la eliminatoria, e hizo levantarse a los aficionados de sus asientos con un tenis encorajinado que dio a Pakistán el ascenso.

Qureshi y Khan hacen vibrar a todo un país

Antes una de las revelaciones de la Copa Davis 2015, Ageel Khan, había vencido al joven Hung, muy apocado ante el ambiente hostil. Wang hizo valer su mejor ránking frente a Iftikhar, y en el dobles Qureshi y el inexpugnable Khan, formaron una dupla letal. Khan tuvo la oportunidad de cerrar la eliminatoria en el cuarto punto, pero Chieh-Fu Wang, 1047 del mundo, logró ganar en cinco sets, prolongando el drama.

Ahí apareció la figura de Qureshi, que se echó todo un país a la espalda y ganó por 7-6 (4), 4-6, 6-4 y 6-3 a un decepcionante Hung. El ascenso de Pakistán es una bellísima historia de superación y lucha contra todo tipo de obstáculos. Unos pioneros que aman este deporte y, lo que es más importante, han hecho que todo un país también lo ame desde este fin de semana.