Andy Murray ha decidido levantar el pie del acelerador. Después de arrebatarle a Federer el número dos del mundo y en una temporada en la que la habitual carga de partidos se ha visto incrementado por el sueño de conquistar la Davis, Murray ha decidido dosificarse y reducir sus compromisos de aquí a final de año. Además, el nacimiento de su primer hijo en los primeros meses de 2016, aligerará el calendario del de Dunblane en el primer tramo de la futura temporada.

Situación opuesta a la de 2014

Hace tan solo un año, Andy Murray llegaba a la gira asiática en uno de los peores momentos de su carrera. La temporada no cumplía ni por asomo las expectativas y la presencia en las ATP Finals de Londres no estaba garantizada.

Una vez terminado el US Open, en el que no pudo superar los cuartos de final, Andy Murray disputó un total de 6 torneos antes de la cita de Londres. El objetivo era claro, y tras ganar 3 de esas competiciones (Shenzen, Viena y Valencia), Murray garantizaba su presencia en el último torneo del año.

(Fotografía: zimbio.com)

Un año después, la situación es radicalmente opuesta. Cumplidos los objetivos y con la final de la Copa Davis en el horizonte, el de Dunblane se ha permitido un descanso. Andy solo jugará uno de los tres torneos que el año paso disputó en tierras asiáticas y en la gira europea indoor previa al torneo de maestros, lo más probable es que solo le veamos en el Masters 1000 de París.

Cansancio físico, frescura mental

"No golpeé ni una sola pelota de tenis en la semana posterior a la Copa Davis, ni he ido al gimnasio; no hice ningún trabajo físico. Empecé a entrenar de nuevo correctamente a los diez días. No jugué en ningún torneo porque estaba realmente cansado. Necesitaba parar" -confesó Murray, que en los primeros ocho meses ha jugado 71 partido (61-10), tan solo 8 menos que en 2014 (59-20).

A pesar del desgaste, Andy Murray afirma sentirse muy fresco mentalmente: "Con el final de la temporada en mente, habiendo jugado un montón de tenis este año, quería asegurarme de llegar tan fresco como me fuese posible para los torneos restantes que me quedan. Mentalmente me siento fresco, lo cual es bueno".

Esta situación se mantendrá al principio de la próxima temporada, y "Mentalmente me siento fresco"es que fruto de su matrimonio con Kim Sears, Andy espera a su primer hijo, que nacerá en los primeros meses de 2016. "Obviamente, al principio del año no podré competir como me gustaría. Después del Abierto de Australia, probablemente no jugaré en las siguientes cuatro semanas, más o menos durante todo el mes de febrero". En estas fechas se disputan torneos en teoría favorables para el escocés, como los ATP 500 de Rotterdam y Dubai.