La segunda semana de competición en el circuito femenino se concentra en territorio oceánico. La proximidad del primer Grand Slam de la temporada, el Open de Australia, sirve a muchas jugadoras para adaptarse al clima y a las condiciones de las Antípodas, y llegar en plenas condiciones al primer gran torneo del año. Los primeros días del año depararon lesiones en jugadoras llamadas a pelear todos los títulos de la temporada, cuya presencia en las competiciones previas al torneo celebrado en Melbourne está descartada. Sin embargo, el WTA Sydney presenta un excelente cartel y un buen número de las mejores tenistas del circuito se darán cita en la ciudad australiana para continuar su puesta a punto en 2016.
Un trío estelar
Al igual que sucedió en Brisbane, es complicado determinar con exactitud quién parte como máxima favorita al título en Sydney, pero la realidad es que, según la clasificación y las sensaciones, hay tres tenistas que parecen estar un paso por delante del resto en estos momentos. La primera de ellas es Simona Halep, que llega al torneo australiano tras no poder competir en Brisbane por lesión. La jugador rumana, primera cabeza de serie del torneo y número dos del mundo, sufrió molestias en el tendón de Aquiles de su pierna izquierda y no disputó un sólo partido, pero ahora competirá en el Apia International Sydney para aumentar su confianza y sus sensaciones de cara al Open de Australia y acercarse al nivel ofrecido en 2015, donde conquistó tres títulos y llegó a las semifinales del US Open.
La segunda gran favorita para llevarse el título en Sydney es Angelique Kerber. La tenista germana es la segunda cabeza de serie del torneo tras las ausencias por lesión de Agnieszka Radwanska y Petra Kvitova, pero su condición de candidata a conseguir la victoria final no se limita a estas bajas. La jugadora alemana completó en 2015 la mejor temporada de su carrera deportiva y todo apunta a que en 2016 mantendrá la línea ascendente en su juego gracias a su extrema competitividad, como ya demostró en el WTA Brisbane, donde llegó a la final y cedió el título a Viktoria Azarenka.
Halep y Kerber parten como máximas favoritas al título
La tercera componente de este trío es Karolina Pliskova. La jugadora checa ya cuajó una excelente temporada 2015, y se encuentra rondando la décima posición de la clasificación mundial, más concretamente en el undécimo lugar. La tenista centroeuropea llegó a seis finales el año pasado y consiguió el título en una de ellas, una situación que le da una dosis de moral para afrontar 2016. Además, una de sus mejores armas es la juventud, pues a sus 23 años está llamada a ser una de las líderes del tenis femenino en los próximos años.
Las alternativas
En el siguiente grupo de favoritas al título se sitúan dos tenistas que vivieron una temporada 2015 diametralmente opuesta, y que han mantenido esta línea contraria en el inicio de 2016. La primera de ellas es Carla Suárez, que el año pasado no terminó de encontrar el juego y las sensaciones, pero que comenzó la campaña de manera notable tras llegar a las semifinales de Brisbane, donde terminó claudicando ante el empuje de Angelique Kerber.
Bencic encabeza la lista de alternativas a la victoria
La segunda 'outsider' es Belinda Bencic. La tenista helvética, con tan sólo 18 años, fue una de las grandes revelaciones del tenis mundial la temporada paasada, completando grandes actuaciones (llegó a tres finales y consiguió dos títulos) y, sobre todo, demostrando que tiene las condiciones necesarias para ser una de las grandes dominadoras del circuito femenino en el futuro. La jugadora suiza no comenzó con buenas sensaciones 2016, cayendo en la segunda ronda de Brisbane ante la estadounidense Samantha Crawford. Sin embargo, el talento convierte a Bencic en una de las candidatas al título.
Otras opciones
Además de este grupo de favoritas, hay una serie de tenistas que completan el cuadro que, si encuentran la inspiración, pueden poner en dificultades a cualquier rival y optar a levantar el trofeo. Las siempre competitivas italianas personalizadas en las figuras de Sara Errani y Roberta Vinci (finalista del US Open 2014), la juventud y carácter de Elina Svitolina, Daria Gavrilova o Anna Karolina Schmiedlova, y la experiencia y veteranía de Jelena Jankovic o Samantha Stosur.
Con el primer gran objetivo de la temporada en el horizonte, todas las jugadoras pretenden aumentar sus prestaciones sobre la pista y rendir a un buen nivel en el WTA Sydney, por lo que la competición se presenta muy abierta y, por consiguiente, repleta de emoción en esta segunda semana de competición de 2016 en el circuito femenino.
Un torneo legendario
El torneo de Sydney es una de las competiciones más antiguas del calendario tenístico. Este evento se disputa anualmente desde 1885, y sólo dejó de disputarse en 1905, entre 1916 y 1918 (primera Guerra Mundial), entre 1941 y 1944 (segunda Guerra Mundial), en 1968 y 1986. Desde su primera edición, las mejores tenistas de la historia han disputado este torneo, y algunas de ellas han grabado su nombre en el palmarés de la competición. Considerado de categoría Premier, el WTA Sydney es uno de los torneos más importantes de la primera parte de la temporada.
Ninguna de las participantes en 2016 sabe lo que es vencer en Sydney
La australiana Margaret Court, con ocho victorias, es la jugadora que más veces ha conseguid el título en la competición oceánica. Nancy Wynne Bolton (siete triunfos), Martina Navratilova (cuatro triunfos), Martina Hingis (tres), Justine Henin (tres), Gabriela Sabatini (dos), Kim Clijsters (dos), Chris Evert, Jana Novotná, Mónica Seles, Arancha Sánchez Vicario, Amélie Mauresmo, Lindsay Davenport, Viktoria Azarenka o Petra Kvitova (ganadora en 2015) son algunas de las tenistas que han conseguido el título en Sydney, lo que representa a la perfección la importancia de este torneo.