Una vez superados los problemas físicos en el pie que le retrasaron el pasado año hasta la posición número 14 del ránking ATP, Milos Raonic ha comenzado este año dando atisbos del gran tenis que atesora bajo su raqueta. El nuevo pupilo de Carlos Moyá solo ha fallado este año en los grandes partidos, pues ha alcanzado las semifinales en Melbourne y la final la semana pasada en Indian Wells. Por el contrario, sí derrotó a Roger Federer en la final de Brisbane, pero este no es un gran torneo de las características de los dos citados anteriormente. 

Por su parte, Denis Kudla, número 63 del ránking ATP, está realizando una campaña bastante discreta, en la que su mejor resultado fueron los dieciseisavos de final en Brisbane. A esto se suma apenas una victoria en cada uno de los siguientes torneos: Auckland, Open de Australia, Memphis e Indian Wells. Ni en Delray Beach, ni en Acapulco, ni en Irving logró ninguna victoria. En primera ronda, Kudla sufrió para ganar 6-3, 3-6 y 6-1 a Hyeon Chung. 

El saque al rescate de Raonic

Raonic jugaba con miedo de recaer de la lesión de AustraliaLo que tiene bueno de ser un gran cañonero, entre otras cosas, es que en malos momentos de juego, en los que fallas más que aciertas, siempre tienes a tu compañero de partida, "el saque", para sacarte las castañas del fuego. Así es como Raonic sobrevivió al comienzo del partido, en el que su rival, Kudla, ya había gozado de cuatro oportunidades de break en los 3 primeros servicios del canadiense que no había podido convertir. 

Ante la frustración del público de Cayo Vizcaíno, que deseaba la victoria de su compatriota Kudla, Raonic comenzó a sobreponerse de sus dudas iniciales. Así es como la igualdad se asentó en el primer set, y qué mejor marcador para reflejarlo que un 6-6 y un tie-break. El canadiense fue el más certero en la muerte súbita gracias a la conjución de un gran juego en la red y de su derecha, lo que le permitió llevarse el primer parcial 7-6. 

Raonic espanta a las dudas

El comienzo del segundo set fue similar al primero, Raonic recuperó las dudas y perdió la eficacia, pero una vez más, ante las oportunidades de break de su rival, volvió a lucir su gran servicio. Sin embargo, la presión le llegó por primera vez a un muy seguro Denis Kudla hasta el momento, y cometió una doble falta en el peor momento, con una bola de rotura en contra, para que Raonic se adelantase 3-2 en el marcador. 

Y como no, con un ace, Milos Raonic cerró otra victoria más esta temporada para acceder a tercera ronda de Miami, donde se enfrentará u bien a Sock o bien a Stakhovsky.