Stanislas Wawrinka está a un solo paso de llegar de conseguir una plaza para la Copa de Maestros de Londres por primera vez en su carrera. El suizo, que junto con el francés Richard Gasquet y el canadiense Milos Raonic se juega uno de los dos billetes restantes para la cita londinense que reúne a las ocho mejores raquetas del año -le basta con llegar a semifinales o que ambos caigan eliminados-, venció en un partido más marcado por los errores que por los aciertos al español Nicolás Almagro (6-3 y 6-2).

El murciano comenzó helado el partido en el primer turno de la central en París-Bercy, a sabiendas que el propio Wawrinka había acabado con sus utópicas opciones de llegar a Londres el día anterior. Con poco ritmo en las piernas, el suizo aprovechó los 'rallies' para ir, poco a poco, desgastando el físico del murciano. Stan, con sus latigazos de revés, dominó desde el fondo de la pista en los compases iniciales, materializó su primera rotura y, posteriormente, volvió a sorprender al murciano desde el resto. En la primera manga Almagro tuvo una efectividad del 42% con sus primeros servicios y, cuando jugó con su segundo, el porcentaje todavía se redujo más, llegando al 25%. Sin duda, la clave que dio a Wawrinka el primer parcial.

Stanislas, séptimo máximo favorito del torneo, encaminó la segunda manga con una rotura rápida. Tras el 2-0 inicial para el helvético, el murciano pidió el fisioterapeuta aquejado de molestias en la zona de la ingle izquierda. Stan, inquieto, siguió de cerca la situación a expensas de asegurarse, con una nueva victoria, sus esperanzas de lograr uno de los dos billetes restantes para la Copa de Maestros.

Tras la reanudación del encuentro, Almagro tuvo un servicio plácido pero al resto se repitió la historia. A pesar de aguantar los peloteos, el suizo llevó la iniciativa y se lo apuntó a su marcador. Con 3-1 para Wawrinka y con las molestias perjudicando, cada vez más, todos y cada uno de los movimientos de Nico, hicieron que el suizo, no sin dificultad en sus servicios, liquidara un encuentro que fue perdiendo ritmo con el paso de los minutos. Con 4-2, Almagro se dejó llevar y concedió otra rotura con una doble falta que mostraba las intenciones del murciano por acabar cuanto antes. Desde el servicio, Wawrinka selló su pase a cuartos de final.

Almagro se marcó como objetivo acabar el año entre las 15 mejores raquetas del planeta. Lo consiguió. Oficialmente, Nico está ya de vacaciones pero de reojo observará cuál es el camino para llegar en 2014 a la Copa de Maestros, su próximo reto. Wawrinka, por su parte, se enfrentará en cuartos de final al vencedor del duelo entre Novak Djokovic y John Isner. A un solo paso de Londres. Un sueño para el tenista de Lausana que culminaría, según sus propias palabras, "un año excepcional".