2004. Ese fue el año en el que empezó a fraguarse una rivalidad tenística que deleita, todavía hoy, al mundo del deporte. Fue el año en el que, por entonces, una joven promesa de 17 llamada Rafael Nadal se enfrentó, por primera vez, a uno de los más grandes del momento, Roger Federer. En aquel encuentro, Nadal empezó a escribir su leyenda ganando al Maestro suizo. A partir de ahí, estos dos colosos se han enfrentado 31 veces más. Las estadísticas entre ambos sorprenden. Pese a la igualdad tenística que existe entre ellos, el español arrastra un marcador favorable de 22-10. Sin duda, cuando Federer parecía no tener rival, se topó con su bestia negra. El de Manacor fue el único capaz de competir y destronar al helvético.
Cómo llegan
Así pues, esta semifinal del Open de Australia enfrentará a Nadal y Federer por 33ª vez. Sin duda, una final anticipada. Ambos llegan al encuentro en un estado de forma parecido. Si bien Nadal sufrió para vencer a Dimitrov, se ha mostrado sólido durante todo el torneo. El suizo, por su parte, llega al partido tras arrollar sin piedad al británico Andy Murray.
Nadal llega como número 1 del ránking mundial después de volver, el año pasado, de un parón de medio año. El español fue capaz de reencontrase con su juego y muestra ya un nivel físico espectacular. Nadal recortó puntos a Djokovic en un abrir y cerrar de ojos y le quitó el número 1. El de Manacor ha empezado el año en buena forma, y pese a tener una molestia en la mano, producida por una ampolla, a buen seguro estará a la altura del partido.
Federer, por su parte, llega como número 6 del mundo, lo que demuestra la debacle que sufrió la temporada pasada. De todas formas, el Maestro suizo ha iniciado este Open de Australia en un estado de forma y juego que recuerdan a su mejor versión. No lo tendrá nada fácil de este modo Nadal, pues Federer parece estar de vuelta y con ganas de reivindicar lo que un día llegó a ser. El encuentro se disputará mañana, viernes, a las 9:30 hora española.
Grandes partidos
De los 32 encuentros que han disputado, muy pocos han pasado al olvido. Ambos se han visto las caras en un sinfín de finales apasionantes. Sin ir más lejos, en 2009 y en este mismo torneo, Federer terminó llorando en público fruto de la impotencia. El suizo acababa de perder la final del Open de Australia (6-7, 6-2, 7-6 y 6-4) y veía cómo Nadal le cogía el testigo en el Olimpo del tenis mundial.
¿Quién no recuerda también esas dos finales de Wimbledon? En 2007 Nadal se plantaba por primera vez en su carrera en una final del torneo británico. Después de un derroche físico de ambos tenistas, Federer se llevó el encuentro tras cinco sets. En 2008, sin embargo, Nadal llegó con sed de título y venganza. Fue otro partidazo. Se llegó también al quinto set y, en esta ocasión, el español fue capaz de ganarlo por 9-7 venciendo así, por fin, a Federer en su territorio.
También se han visto duelos memorables en la tierra roja de París. En ella, pero, el español no ha dado opción a Federer. Nadal se ha llevado, ante el suizo cuatro de los ocho Roland Garros que lucen en sus vitrinas.