El Rojo lo ganó de taco

Con goles de Parra, de taquito, y de Cáceres Independiente venció a Douglas Haig de local por 2-0, sumó su tercer victoria al hilo y sigue acercándose a los de arriba. Para ilusionarse.

El Rojo lo ganó de taco
Parra llegó a los 100 partidos en el Rojo y convirtió el primero de taco (Fuente: Independiente oficial)
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Por Sabrina Gjinovich

Otro aire se respira en la Avellaneda roja. La llegada de Omar De Felippe al banco de Independiente hace 14 partidos trajo orden, disciplina, confianza y, lo más importante para los hinchas, puntos. Con el nuevo entrenador el Rojo obtuvo 29 puntos (tenía dos) y ahora está a tan sólo uno de los puestos de ascenso, con aspiraciones de quedar más arriba antes de que termine el año.

Los Diablos llegaban con dos victorias en fila (seis sin perder) y de obtener un contundente 3-0 frente a Ferro, por lo que la confianza estaba a flor de piel. Su rival, Douglas Haig, con 19 puntos y marchando en el puesto 17, venían de cosechar un buen punto de local ante uno de los animadores del torneo, Banfield (0-0). El otro atractivo del encuentro fue la vuelta al arbitraje de Pablo Lunati, quien llevaba ocho meses parado.

Si bien es cierto que en el fútbol cualquier resultado es posible, el envión anímico y los últimos resultados del Rojo demostraron que se hizo fuerte de local y que ahora los rivales lo respetan como lo que es, un grande. Así comenzó la tarde-noche en el Libertadores de América, con un Independiente intentando tener llevar el bastón de mando del partido y un Fogonero que, aún mostrando su juego de toques, fue a esperar al rival.

Los primeros intentos fueron del local, desde lejos, por medio de Leonel Miranda y de Gabriel Vallés, quien había acertado el anterior partido. Sin embargo, el primer grito del partido llegó recién a los 22 minutos y fue con una definición bien cercana a los tres palos. Pisano ensayó un desborde por derecha, entró al área y puso el centro atrás para que Facundo Parra meta una exquisita definición de taco y ponga arriba a su equipo en el marcador.

El Milan de Pergamino intentó tener la pelota, pero sufrió la falta de profundidad y a una defensa roja bien parada. Los dirigidos por De Felippe tuvieron algunas ocasiones más, una clara de Pisano, pero se fueron al descanso con la mínima diferencia.

En el complemento, Independiente salió un poco dormido y los conducidos por Marcelo Grioni aprovecharon las desatenciones para meterle presión, tanto que fue allí donde tuvieron una de sus pocas chances claras con un disparo en el que el Ruso Rodríguez dio rebote y por poco no le quedó al nueve de los de Pergamino, Héctor Cuevas.

Luego el local despertó de la siesta y tuvo varias chances para aumentar la cuenta, dos de ellas con un Miranda muy activo y una que le quedó a Zapata frente al arco pero que tiró por arriba del travesaño, pero la falta de definición hizo que el clima se pusiera un poco tenso por miedo a un desenlace adverso.

Con el empuje de su gente el respiro llegó cerca del final. A los 42, Federico Mancuello probó desde afuera, el arquero Olivero dio un rebote, Pizzini no llegó a conectar pero la pelota le quedó a Samuel Cáceres, quien convirtió el 2-0 (el tercero para él en el campeonato) y puso un manto de tranquilidad a la impaciencia de los Rojos.

En cuanto al regreso a las canchas de Lunati, luego de su inconveniente con la AFIP, su arbitraje fue discreto, sin jugadas de tensión y con una leyenda llamativa en su camiseta: “La vuelta del loco”.

Las mayores dudas para De Felippe quedaron en la mitad. Marcelo Vidal jugó muy pegado a los centrales y se lo vio desconcertado, mientras que Martín Zapata fue más doble cinco que ocho y tuvo un rendimiento regular que los hinchas le hicieron notar. Douglas Haig, que cumplió 95 años, aún no puede hacer pie de visitante (14 sin ganar en esa condición) y está en zona de descenso.

El Rojo llegó a su séptimo partido sin conocer la derrota (nueve de local), por primera vez en mucho tiempo ganó tres seguidos, volvió a mantener su arco en cero (486 minutos sin goles en contra) y de nuevo ganó por más de uno de diferencia. De yapa, le descontó tres al puntero Defensa y Justicia, que perdió ante Ferro (aún falta que juegue Banfield).

Así, de taquito, los hinchas de independiente ven por fin un equipo dentro de la cancha y, pese al mal momento histórico, se las arreglan para festejar el lento renacimiento de su club.

El resumen del partido: