El arranque para Belgrano no fue bueno, incluso antes del pitazo inicial, ya que Lucas Bernardi fue expulsado previo al comienzo del partido porque sus dirigidos salieron a la cancha más allá del horario indicado para el comienzo, luego de esto, su ayudante, Federico Fernández fue quien quedó como la voz cantante en el banco celeste.

Por el lado de River Plate, Marcelo Gallardo sorprendió al alinear desde el arranqué cinco mediocampistas y tan solo a Lucas Pratto como referencia de ataque. Aun así el primer tiempo puede definirse tranquilamente como un monólogo por parte del Millonario, donde el Pirata solo corrió detrás de la pelota.

A pesar de que las condiciones climáticas no ayudaban al desarrollo de buen fútbol, a partir del rendimiento de sus volantes, River logró dominar con comodidad el desarrollo del encuentro. Fue Juan Fernando Quintero quien se posicionó como armador de juego, mostrando destellos de su gran calidad técnica, con esto los de Nuñez lograron maquillar la ausencia casi total de Gonzalo Martínez, quien pareció no estar en la cancha.

El Pirata logró mantener el cero durante los primeros 45 minutos gracias a la mala puntería de los dirigidos por Gallardo en los disparos de media distancia y a las atajadas de Cesar Rigamonti en cada una de las ocasiones de gol que tuvo el Millo. El arquero del Celeste le tapo dos veces a Pratto lo que podría haber sido la apertura del marcador, en ambos casos tras exquisitas habilitaciones de Quintero. El mismo volante colombiano fue quien definió apenas afuera a falta de pocos minutos para el final de la primera mitad.

En el comienzo del segundo tiempo Belgrano emparejó el juego e incluso tuvo una chance muy clara de gol en los pies de Matías Suárez tras una gran jugada individual de Juan Brunetta. Luego el Millonario volvió a tomar protagonismo y con cambios decididamente ofensivos trato de llevarse puesto al Pirata. Allí fue donde Rigamonti se convirtió en la figura del partido para soportar los embates de River que llegaron mayormente a través de pelotas paradas.

Belgrano tuvo algunas chances más durante el complemento ya que el equipo del Muñeco se desguarneció atrás y otorgó espacios al conjunto de Alberdi. Pero el dominio del juego fue prácticamente de La Banda en todo momento. El entrenador del Celeste había anticipado que había que correr y que el ritmo del partido lo iba a marcar River, y así se dio el encuentro pero Belgrano corrió siempre detrás de la pelota y nunca estuvo ni siquiera cerca de frenar al Millonario.

El Pirata deberá mejorar mucho de cara al encuentro de la tercera fecha que lo enfrentará el próximo viernes en condición de local contra Estudiantes de La Plata en Alberdi. Para ese cotejo habrá que ver si Bernardi podrá contar con Martín Rivero, quién salió lesionado en la primera mitad.