No había demasiadas ganas de preguntar a Ricard Casas en la sala de prensa de Pisuerga tras la nueva derrota del CB Valladolid –la vigésimo novena, cifra espeluznante–, esta vez ante el CAI Zaragoza. Tampoco el técnico morado tenía demasiadas ganas de hablar y se ahorró la clásica valoración previa, pasando directamente a las cuestiones de los periodistas.

El entrenador pucelano se quejó de la baja efectividad de sus hombres en el lanzamiento –9% en triples–, pese a haber realizado veinte intentos más, y remarcó que esa había sido la causa del alto número de tiros librados por parte de los zaragozanos. “Muchos de los triples han sido en situación de balance defensivo, tras rebote largo, en contraataque, en situaciones de juego abierto”.

Según Casas, el equipo mejoró defensivamente tras el parcial de 0-13 obtenido por los visitantes en el inicio, “aguantando más las situaciones tanto de tiro como de penetración al cambiar a defensa zonal”. Pero dicha mejoría no se mantuvo mucho tiempo. “Hemos estado mal en el nivel de rotación defensiva, en los bloqueos directos, hemos llegado tarde”, lamentó el coach manresano.

Y es que la defensa en conjunto de los morados fue un día más un auténtico desastre. Lo cual aprovechó perfectamente el rival para masacrar la canasta pucelana. “Han tenido mucho acierto y han jugado con muy buen equilibrio tanto en juego interior como en lanzamiento exterior”.

La mejor noticia para los de Ricard Casas es que sólo quedan dos partidos para la conclusión de la Liga Endesa, que como el propio técnico reconocía se les está haciendo eterna. “Estamos sufriendo mucho, es duro”. Si bien el optimismo del entrenador catalán le lleva a matizar incluso esa afirmación. “Sufrimiento bien entendido, como profesionales. Es nuestro trabajo, hay que seguir sufriendo hasta el final”, subrayó.

Por su parte José Luis Abós, técnico del CAI Zaragoza, se mostró satisfecho por la victoria y el juego desplegado por sus hombres. “La clave del partido ha estado en nuestra entrada al partido, con gran intensidad defensiva y acierto en el tiro exterior, y la otra ha estado en nuestra salida tras el descanso”.

El jefe del banquillo zaragozano temía la reacción del CB Valladolid tras esos parciales. “Pero hemos superado con nota esos dos momentos vitales, con buena defensa, utilizando cambios defensivos para evitar tiros exteriores de Omari Johnson y Andjusic”. Cambios defensivos que, tal y como analizaba Abós, provocaron desemparejamientos y, por lo tanto,  generaron algunas opciones de ataque en forma de rebote ofensivo para los vallisoletanos. “Pero el partido ya había quedado sentenciado en el tercer cuarto”, sentenció el técnico.

VAVEL Logo
Sobre el autor
Alberto Blanco Paredes
Pucelano por los cuatro costados, me dedico a esto del Periodismo porque siempre me encantó escribir y más si era sobre algo relacionado con Valladolid. Incluso en una época de mi vida, cuando la galera no dominaba tanto mi existencia, me dio por escribir un libro. Ahora, desde el barco en el que remo sin descanso, intento engañar a la triste lógica relatando las victorias del Club Baloncesto Valladolid y del Real Valladolid. E incluso, desafiando por completo a la razón, trato de seguir escribiendo libros...