El base de 31 años ha logrado una marca histórica desde que se tienen datos, combinar un partido de 20 puntos y 20 asistencias sin cometer ni una sola pérdida en los casi 30 minutos que estuvo en pista.

Fue un partido muy cómodo para los californianos debido a la baja en los New Orleans Pelicans del máximo anotador de la Liga, Anthony Davis y del mejor base del equipo, Jrue Holiday. Tim Frazier se vio completamente superado en defensa y no pudo hacer nada para detener el buen hacer de Chris Paul.

No solo consiguió esta marca sin precedentes en el global de la NBA, sino un récord de la franquicia, ya que ningún jugador de Clippers había conseguido hacer un 20/20 con asistencias. Esto permitió que el equipo tuviera la máxima efectividad de la temporada (57,4% en tiros de campo) y el mejor registro anotador del curso siendo un vendaval ofensivo especialmente en la segunda mitad en la que consiguieron 72 puntos y fue el factor determinante para que los Clippers se despegaran en el marcador de los Pelicans.

La llegada del playmaker ha convertido a la franquicia en un equipo habitual de los Playoffs con un balance de 66% de victorias en cinco temporadas, después de una larga travesía por el desierto sin jugar la post-temporada y siendo considerado el hermano pobre de Los Angeles Lakers durante toda la historia desde que se fundó la franquicia.

Se puede considerar que hay un antes y un después de la llegada  del ex de los Hornets en 2011 formando una pareja espectacular con Blake Griffin. Varias veces ha estado muy cerca del cuádruple-doble, sobre todo en sus inicios de su carrera, lo que le atesora un talento para hacer muchas cosas sobre la pista. Todo el mundo coincide en que es el mejor base puro que existe en la actualidad.

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