El proyecto que empezó en Los Angeles hace ya seis años de la mano de Doc Rivers como entrenador y de los jugadores Chris Paul, Blake Griffin y DeAndre Jordan parece estar agonizando irremediablemente. Un equipo construido para ganar la NBA, pero que no ha podido superar la segunda de playoffs en los últimos cinco años con este núcleo de plantilla.

Este año, a pesar de empezar con un 14-2 de prometedor récord, las cosas se están torciendo ya que el cuarto puesto parece escaparse y Oklahoma, desde atrás, aprieta por el quinto puesto que ahora mismo tienen los angelinos.

Su pivot titular, DeAndre Jordan ha hablado para explicar la situación del equipo y ha dejado titulares importantes. “Tenemos problemas ahora mismo, creo que no tenemos la mentalidad adecuada para cerrar partidos. Si no cambiamos, nos iremos muy rápido a casa en playoffs”.

Un ejemplo de esa débil mentalidad es el partido en casa frente a Sacramento Kings del pasado domingo, una patética derrota, después de ir 18 puntos arriba a falta de solo cinco minutos, hecho que no ha pasado en ninguno de los partidos de este año en toda la NBA. Su entrenador, Doc Rivers decidió dar dos días libres a sus jugadores para que reflexionen sobre el rumbo del equipo ya que han perdido diez de los últimos 19 partidos.

También ha declarado Jordan: “Hemos tenido nivel para competir con los mejores de la liga al  comienzo de temporada y de ahí viene nuestra frustración, sabemos todo nuestro potencial porque lo hemos demostrado pero ahora no lo estamos haciendo. No podemos ser tan inconsistentes en ambos lado de la pista”.

Veremos como acaban los Clippers la temporada regular y después la post temporada pero las sensaciones que transmiten son bastantes pobres y muchos de sus jugadores acaban contrato este verano por lo tanto, quizás, esta temporada sea la última oportunidad para estos Clippers.