Muchas dudas debía despejar Marcel Kittel (Etixx-Quick Step) en este 2106. La temporada anterior fue nefasta para el ciclista nacido en Arnstadt. Un virus condicionó totalmente la primera parte de la temporada y no pudo recuperarse para participar en el Tour de Francia. Fue un golpe anímico muy duro para el alemán.

A partir de entonces la relación con su entonces equipo, Giant-Alpecin, se quebró y Kittel puso rumbo a la escuadra belga Etixx-Quick Step de la que salía Mark Cavendish.

Regreso por todo lo alto

En el todopoderoso Etixx, Marcel Kittel recuperó la confianza y la forma física. No tardó en demostrar que su fichaje era todo un acierto. Dubai era el escenario donde Kittel se vestía de azul por primera vez en competición. Primer día y primer triunfo, al que se sumó el triunfo en la etapa final y la clasificación general, su primera vuelta por etapas.

Dubai encontró al mejor Kittel | Foto: Tour de Dubai
Dubai encontró al mejor Kittel | Foto: Tour de Dubai

Regresó a Europa, al cálido Algarve para seguir demostrando que esta de vuelta. En tierras lusas se adjudicó dos etapas, mostrando un excelente estado de forma. La siguiente parada fue París-Niza pero las dantescas condiciones meteorológicas le impidieron cualquier posibilidad de triunfo. En los Tres Días de la Panne volvió a probar las mieles del triunfo y se llevó su primera clásica de la temporada, Scheldeprijs, con la mira ya puesta en el Giro de Italia.

Rey 'holandés' del Giro

Su inicio en la Corsa Rosa fue demoledor. Con el inicio de la carrera italiana en Holanda, el monologo de Kittel fue total, dos triunfos inapelables de etapa y con el premio de la maglia rosa. Pero fue llegar a suelo italiano y la suerte le dio la espalda. Pinchazos, abanicos, le dejaron fuera de lugar para incrementar su casillero de triunfos. Abandonó en la lluviosa contrarreloj de la novena etapa.

Kittel emocionado besa la maglia rosa | Foto: Giro de Italia
Kittel emocionado besa la maglia rosa | Foto: Giro de Italia

Una medalla de bronce en el campeonato nacional y la participación en Ster ZLM, fue la preparación para la Grande Boucle. En Francia se encontró con un Mark Cavendish, pero Kittel encontró su triunfo -agónico frente a Bryan Coquard- en Limoges. No tuvo mas opciones claras en un Tour siendo segundo en la clasificación por puntos. Un botín suficiente pero escaso dada la gran primera parte de la temporada.

Por mílimetros se llevó Kittel la cuarta etapa del Tour | Foto: Tour de Francia
Por mílimetros se llevó Kittel la cuarta etapa del Tour | Foto: Tour de Francia

Oportunidad perdida en Doha

Se acercaba el gran momento de la temporada, el Mundial de Doha, el Mundial para los sprinters. Kittel sabía que tenía una oportunidad única y no quería desaprovecharla aunque tuviera el enemigo en casa (André Greipel y John Degenklob).

Una aproximación adecuada con participación en clásicas belgas y alemanas junto con el Eneco Tour dio a Kittel el punto de forma necesario. Ya en Doha, fue uno de los componentes de Etixx-Quick Step que se colgaron la medalla de oro por equipos, pero Kittel tenía puesta lamente en el maillot arcoíris.

Kittel (derecha) muerde la medalla de oro | Foto: Doha Cycling 2016
Kittel (derecha) muerde la medalla de oro | Foto: Doha Cycling 2016

Sin embargo, fueron los grandes perdedores al verse cortados por el abanico que formó la selección belga, que a la postre fue el definitivo. Mezcla de frustración y el calor, Kittel decidió bajarse de la bicicleta y poner punto final a la temporada la del regreso a la máxima competición