A pesar de las flojas predicciones que había para el Gran Premio de España, Lance Stroll logró salvar el día y con un undécimo lugar le dio aire a Williams. La escudería inglesa mejora poco a poco, ya fuera de los últimos lugares, le da batalla a los equipos de la zona baja.
"Fue un fin de semana muy difícil desde el punto de vista del rendimiento, pero llevar dos coches a línea de meta fue un reconocimiento para el equipo. Para los mecánicos en el garaje supone la misma cantidad de trabajo a pesar de nuestro ritmo, pero estoy contento de que hayamos terminado la carrera con nuestros dos coches antes de los test de esta semana", declaró Paddy Lowe sobre lo hecho en el Gran Premio de España.
Además, se refirió al rendimiento de ambos pilotos de Williams. "Con Lance, perdimos por poco los puntos después de una fantástica primera vuelta que lo llevó hasta el puesto 12, una posición en la que mantuvo un ritmo constante y supo manejar bien las ruedas. Sergey tuvo una tarde más complicada, sufriendo con el resto del coche. Se vio obligado a esquivar el accidente de la primera vuelta, lo que le generó la pérdida de temperatura de sus neumáticos", sentenció Lowe.
Lance Stroll, en un buen momento
El piloto canadiense, muy cuestionado al inicio de temporada, comienza a despegarse de su compañero en rendimiento y tras puntuar en Bakú, cerró una buena participación en España. Terminando undécimo, a tan solo un escalafón de los puntos, Lance Stroll vive un momento de tranquilidad en la escudería británica.
"No logramos puntos, pero fue una buena carrera. Volví a empezar bien, ganando muchas posiciones, y luego fui constante e hice todo lo que pude, pero no fue suficiente para puntuar. Después de la salida del coche de seguridad, la carrera se volvió complicada, ya que fue difícil calentar las ruedas y sufrí un poco en ese aspecto, pero en general todo fue bien. Los neumáticos medios fueron bastante fáciles de manejar, y estoy muy contento con la carrera que tuvimos. Undécimo es prácticamente lo máximo a lo que podíamos aspirar", sentenció Lance.
Ahora, intentará seguir con su buen andar en el siempre complicado Gran Premio de Mónaco, circuito en el que abandonó la temporada pasada por un problema en los frenos a siete vueltas del final.
Sergey Sirotkin, en la mira de todos
Mas allá de los problemas del monoplaza, el ruso no esta teniendo un buen año y comienza a tambalear en la cuerda floja. El hecho de tener a un piloto experimentado como Kubica por detrás, hace que sea aún más cuestionadas sus actuaciones hasta el momento.
"Tuve un buen comienzo, pero prácticamente me quedé atrapado entre tres coches debido al accidente de Grosjean delante de mí. Tuve que ir más despacio para evitar un golpe, y al reincorporarme era el último de la parrilla. Me las arreglé para luchar un poco con Hartley y seguir su rebufo durante un par de vueltas. Además, luché mucho con la comodidad de mi asiento, un aspecto que estamos investigando", dijo Sergey tras el Gran Premio de España.
Últimas oportunidades para el ruso que tampoco logró explotar en la GP2 Series, donde apenas ganó tres carreras entre el año 2015 y 2016.
