Ante apenas escasos minutos para el derbi londinense, entre Chelsea-Tottenham. ¿Qué sería el fútbol sin derbys como este? Prácticamente muchos de los partidos pasarían por desapercibido para miles de aficionados, ya que, en la mayoría de los partidos no habría esa atmósfera tan atractiva que percibe el aficionado para seguir este tipo de partidos.
Estos partidos son diferentes, llamativos, apasionantes, épicos. Son partidos donde el aficionado gasta un cierto dinero en una entrada, y sabe que no va a mal gastar ese dinero, debido a que el espectáculo está servido. El estadio se convierte en un templo, donde miles y miles de personas se dejan la garganta para animar a sus jugadores, en ese momento sabes y sientes que eres un privilegiado, ya que no todos pueden asistir a un partido de fútbol y estar en esa atmósfera que te envuelve y te hace enloquecer gracias a esa adrenalina tan característica que producen estos partidos.
Chelsea-Tottenham, aunque no sea un derbi certero, ya que el auténtico rival del Tottenham es el Arsenal, y de Chelsea, el Fulham, ha pasado a ser un derbi, no solo por que ambos equipos son de Londres, si no, también por la rivalidad que se ha creado en estos últimos años, donde ambos equipos buscan superar al rival en la clasificación y alardear de lo conseguido.
Desde hace bastante tiempo siempre hemos visto como Chelsea ha pasado literalmente por encima de los Spurs. Pero esta vigente Premier League, es diferente, es de esas ediciones que nos dejan sorpresas muy aisladas pero totalmente inesperadas. Como ya pasó en la temporada 1994-95 con el Blackburn Rovers, y como esta con el Leicester, capaz de pasar del casi descenso a prácticamente conseguir el título de liga, en 9 meses. Pero, algo que llama la atención es el poco elogio que está recibiendo el equipo de Pochettino, ya que se encuentran en segunda posición, ofreciendo un fútbol de lo mejor hoy en día en Premier, superando a equipos como City, Arsenal, United y Chelsea. Rivales con muchísimo más presupuesto que los Spurs. Aún así, esta temporada no han podido estar a la altura ni superar a los de Pochettino, siendo el equipo más joven de la Premier, derrotando un mito como "con la experiencia se llega más lejos que con la juventud".
Los Spurs quieren derrotar también una auténtica pesadilla, la de poder ganar a Chelsea en Stamford Bridge, es una pesadilla que llevan consigo desde 1990, es decir, 26 años sin poder conseguir la victoria en el templo blue. Sin duda, este Tottenham querrá derrotar a Chelsea, en el derby más importante de los últimos 26 años. Si no lo consiguen, estarán otro año consecutivo sin ganar en Stamford Bridge y otro año más sin el ansiado trofeo, ya que si hoy pierde, el Leicester de Claudio Ranieri se proclamará matemáticamente campeón de la Premier.
Están en la situación idónea para lograrlo ya que Chelsea está atravesando una de las peores temporadas del club en años, donde tendrá que pasar el próximo año, sin disputar competición europea. A pesar de no ser una buena temporada, un derbi siempre es un derbi, y es el escaparate ideal para dar un golpe sobre la mesa y resurgir de las cenizas. Seguro que Chelsea saldrá a darlo todo para intentar pasar página y darle una alegría a su afición, la cual siempre ha estado en todo momento.
Hoy veremos un duelo táctico apasionante entre entrenadores muy diferentes, Pochettino opta por defender con el balón, es un equipo atrevido, que le gusta tocar el balón y sacar la pelota jugada cuando tiene ocasión, cuando no la tiene no dudan en enviar un balón en profundidad hacia Kane. Hiddink es un entrenador de la "vieja usanza" un poco más conservador, a quien le gusta tener bien poblada la defensa y un centro del campo bien arropado, aunque en esta temporada Chelsea no está plasmando las órdenes de su técnico, tal vez sea ese uno de los errores de Chelsea. Ambos equipos utilizarán el mismo esquema táctico el 4-2-3-1, así que, probablemente sea un partido muy táctico entre ambos equipos que se conocen muy bien y en el cual ninguno quiere perder. Ante esto, el partido puede estar marcado por alguna genialidad de Hazard, Lamela, Costa o Kane, entre otros.
No obstante, será un derbi con mucho en juego, para unos la aspiración de no perder el día de hoy el título ante un rival de la misma ciudad, como Chelsea. Y el otro deberá ganar para intentar que la mala temporada que está realizando no sea aún más negativa después de perder un derby en casa, tras 26 años invictos.