No hace muchos años el Milan era el equipo más temible de Europa. Así, como leéis. Il Diavolo se paseaba por cada rincón del continente que quedaba por conquistar, con los deberes hechos ya en Italia. Eran tiempos de Dida, Cafú, Nesta, Maldini, Staam, Pancaro, Serginho, Ambrosini, Gattuso, Pirlo, Rui Costa, Seedorf, Kaká, Shevchenko o Inzaghi.

Un Milan de leyenda. / Foto: uefa.com
Un Milan de leyenda. / Foto: uefa.com

Precisamente, muchos de estos ejercen de entrenadores. Sin ir más lejos, el propio Rino Gattuso es el actual técnico del Milan. Casi nada. También lo fueron Seedorf, ahora en el RC Deportivo, o el Pippo Inzaghi, dirigiendo al Venezia en Segunda. Todos estos tienen algo en común. Y es que han sido parte de las medidas desesperadas que tomó la directiva rossonera para evitar una debacle anunciada. Fracaso tras fracaso cada temporada. Sin ver el fin. Sin ver la luz al final del túnel. Son ya siete años del último Scudetto que alzaron. Desde entonces, todos se han teñido de bianconero.

Shevchenko, es seleccionador nacional de Ucrania.  Otros como Andrea Pirlo anunció su retirada pocos meses atrás, colgando las botas en el New York City. Pasos que siguió Kaká, aunque en su caso fue en Florida, Orlando City. Muy cerca de él se encontraba Alessandro Nesta, dirigiendo a Miami FC, equipo de NASL (división ahora mismo "extinta").

Nesta ya es grifone

Precisamente, 'Sandro' ha estado en el foco de la noticia esta última semana. Tras dejar el conjunto estadounidense al finalizar la campaña pasada (ganó la liga regular, pero no el título final), se encontraba sin equipo. Dicho esto, fue el Perugia de Serie B quien se abalanzó sobre él. No antes sin destituir a Roberto Breda, justo después de clasificar al equipo para los playoffs de ascenso a Serie A. Paradojas de la vida que le dieron el puesto de los Grifoni.

Prosiguiendo con las cosas del destino -y del Calcio-, Nesta, con su Perugia (8º), se verá las caras en la primera ronda del playoff con el Venezia (6º) que dirige su excompañero Pippo Inzaghi. Otro que también se encuentra enrolado en la postemporada es Fabio Grosso con su Bari, por lo que son un total de tres campeones del mundo luchando por ascender con sus escuadras a la máxima categoría del fútbol transalpino. ¡Bienvenidos a Alemania 2006!

Digno de una carrera exitosa

Un Nesta que goza de una de las trayectorias futbolísticas más envidiables del panorama futbolísitico. Tres Scudetti, tres Coppas, tres Supercoppas, dos Champions League y un Mundial. Siempre se dice que no importa la cantidad, sino la calidad. Pues su palmarés bien podría ajustarse a ese dicho. Romano de nacimiento, comenzó a labrarse su carrera desde bien pronto. Estuvo cerca de enrolarse en las categorías inferiores de la Roma, aunque su padre, fiel tifoso de la Lazio, lo evitó, por lo que acabó uniendo a 'Sandro' y los laziale poco después.

Nesta y Totti durante un 'Derby della Capitale'. / Foto: gettyimages
Nesta y Totti durante un 'Derby della Capitale'. / Foto: gettyimages

La relación con los biancocelesti iba en serio, ya que los años pasaban y su protagonismo iba aumentando, a la par que su nivel (jugó de delantero y centrocampista antes de ser defensa). De ese modo, no tardó en llegar al primer equipo, lo hizo de la mano del mítico Dino Zoff. Aunque fue con Sven-Göran Eriksson con quien dio el paso definitivo. Nueve temporadas con la Lazio dieron para mucho, como por ejemplo, ser uno de los protagonistas del último Scudetto cosechado, una Coppa, dos Supercoppa o una Recopa de Europa.

Cuenta con un palmarés más que envidiable: tres Scudetti, tres Coppas, tres Supercoppas, dos Champions League y un Mundial

Ese éxito no pasó desapercibido y el Milan echó sus redes para pescar uno de los centrales italianos con mayor futuro (operación favorecida por la crisis económica de la Lazo). El resto es historia. Con el ya mentado equipo de leyenda de los rossoneri al principio, y Carlo Ancelotti como técnico, fueron diez campañas que dieron para mucho (después llegaría Massimiliano Allegri). Dos Scudetti, dos Champions League, dos Coppas y una Supercoppa. Entre medias, quizás el más importante, el Mundial de 2006 en Alemania.

MLS, India y el salto a los banquillos

Quemadas sus etapas al máximo nivel, decidió hacer las maletas y cruzar el charco. Allí le esperaba el Montréal Impact de la MLS, de clara influencia italiana ya que su propietario es Joey Saputo, el mismo que el del Bologna. Allí coincidió con sus compatriotas Ferrari, Corradi o Di Vaio. Dos campañas y un Copa Canadiense con el Impact fueron suficientes para después poner rumbo al Chennaiyin FC de la Superliga India, entrenado por Marco Materazzi, donde apenas disputó tres partidos. 

Nesta durante su etapa como entrenador en el Miami FC. / Foto: NASL
Nesta durante su etapa como entrenador en el Miami FC. / Foto: NASL

Esa llama de futbolista terminó apagándose en el país asiático. Pero apenas meses después, volvía a estar metido en el mundo del Calcio. Esta vez como entrenador, estrenándose, paradójicamente, en el Miami FC, equipo fundado por Paolo Maldini. Allí se fogueó en los banquillos durante dos temporadas, lo que le sirvieron para ganarse un buen cartel y encontrarse donde está ahora, en el Perugia. Tiene por delante, de momento, un partido. Quien sabe si hace la de 'llegar y besar el santo'. Es decir, ganar una serie de duelos que les sirva para ganarse el tercer billete de ascenso a Serie A y ver a Alessandro Nesta de nuevo por los campos de San Siro, Olímpico, San Paolo o Juventus Stadium. Aunque esta vez de entrenador.