Bélgica se destacó en este certamen por realizar un fútbol vistoso, dinámico y ofensivo que, en muchas ocasiones, lo reflejó en el marco rival. No obstante, también un factor determinante para los grandes logros en Rusia 2018 fue la solvencia de Thibaut Courtois, guardameta del Chelsea.

Durante tres partidos dejó en cero su portería, haciendo lo mismo en la fase de grupos frente a Panamá y contra Inglaterra, además de que mantuvo su portería intacta de nueva cuenta contra los ingleses en el juego por el tercer lugar, destacando su labor en la parte complementaria cuando tuvo un par de magníficas intervenciones que impidieron el primero del rival y que, a la postre, los Diablos Rojos lo liquidaron con el gol de Hazard (ganador de la bota de plata).

27 atajadas realizó en la gran cita. Thibaut Courtois hizo un promedio de cuatro paradas por partido que le permitió a su equipo seguir avanzando en la justa. Asimismo, según datos de la FIFA, Courtois tuvo el 81.8% de atajadas, siendo uno de los mejores en estos 64 partidos aunado a que disputó 630 minutos y recorrió 27,6 kilómetros.

Courtois recibió dos anotaciones contra Túnez en fase de grupos, aunque en aquella tarde el partido estaba resuelto para Bélgica. Contra Japón, de igual forma, aceptó otras dos anotaciones, pero los Diablos Rojos se las arreglaron para darle la vuelta. Sumó uno más en contra en los cuartos de final contra Brasil y otro más en las semifinales contra Francia, resaltando que gracias a sus intervenciones el partido no quedó con un marcador más abultado.

El guardameta del Chelsea se une a su compatriota Michel Preud'homme (que participó en Estados Unidos 1994) cuando y ambos se proclaman como los dos guardametas belgas capaces de conseguir dicha distinción. Además, Courtois se une a grandes nombres como Oliver Khan, Iker Casillas o Gianluigi Buffon, que han conseguido alcanzar el Guante de Oro.