Han pasado nueve meses de competición y no ha habido lesión, árbitro, rival cuesta de enero o de febrero que logre parar a un raudo Atlético de Madrid, que va como un tiro a por una Liga que no gana desde el año 1996 cuando se hizo con el título del campeonato doméstico y con la Copa del Rey. Las comparaciones con aquel equipo que dirigió Radomir Antic se pueden ver en el carácter de los jugadores o por el gusto de las jugadas a balón parado. De lo que no cabe duda es que Simeone, esta vez en el banquillo, ha mejorado la versión del técnico serbio en la década de los noventa.

Con su victoria por la mínima con un gol de cabeza de Raúl García, el Atlético de Madrid ha conseguido batir su récord de puntos en una Liga. Los colchoneros suman 88 puntos en apenas 35 jornadas y consiguen dejar anticuados los 87 puntos que consiguió Radomir Antic en la temporada 1995/96, cuando el campeonato doméstico contaba con 42 jornadas en vez de las 38 con las que cuenta en la actualidad.

Al Atlético de Madrid le quedan aún por delante tres jornadas más para establecer el récord de puntos históricos en una única temporada mucho más lejos. Levante, en el Ciutat de Valencia, Málaga, en el Vicente Calderón, y FC Barcelona, en el Camp Nou, son las próximas piedras en el camino del conjunto rojiblanco por el título de la Liga.

Otro récord

Además de superar el récord de puntos, el Atlético de Madrid ha conseguido enlazar por primera vez en la historia nueve triunfos de forma consecutivo en una única Liga. La hazaña estaba situado en ocho victorias y Simeone, que se quedó a una en el inicio de la temporada al perder contra el Espanyol en Cornellá en la jornada 9, tenía ganas de añadir un hito más a su currículum como entrenador desde que llegara a la ribera del Manzanares en lugar de Goyo Manzano.

Son pocos los récords que le quedan a Simeone por batir. Pero el más cercano es el sumar seis puntos más para que el Atlético de Madrid se proclame vencedor del campeonato de Liga. Si vence al Levante en el Ciutat de Valencia y al Málaga en Madrid, contando siempre con que el Real Madrid no pinche en las dos próximas jornadas, el Atlético de Madrid se proclamaría campeón de Liga en el Vicente Calderón, junto a su hinchada, y recibiría el “pasillito” en el Camp Nou en la última jornada de la Liga contra el FC Barcelona.