La última vez que la UD Las Palmas estuvo en Primera División, hace trece años, descendió al final de temporada tras una mala racha de seis partidos en la que solo consiguió tres puntos (tres empates ante Zaragoza, Sevilla y Real Sociedad). Sin embargo, sus primeros siete encuentros ligueros fueron bastante prometedores.

En esta temporada del regreso a la máxima categoría del fútbol nacional, la UD solo ha conseguido cinco puntos en siete partidos, un pobre bagaje que les sitúa en la decimonovena posición liguera, inmersos en los puestos de descenso. A estas alturas, en aquella lejana temporada del 2001/02, el equipo amarillo marchaba decimoquinto con siete puntos obtenidos.

En la primera jornada de aquel curso futbolístico, Las Palmas venció con solvencia al Mallorca a domicilio por cero goles a tres. En una gran segunda mitad, el equipo de Fernando Vázquez, con goles de Pablo Lago, Jorge Larena y Carmelo, logró un importante triunfo ante uno de sus “rivales”. Ya en la segunda jornada, y en el Estadio Insular, Las Palmas pereció, devolviendo a la afición a la realidad, frente a uno de los grandes de aquel año: el Deportivo de La Coruña. Un solitario gol de Fran en los últimos minutos del choque alejó la segunda victoria amarilla de la capital grancanaria.

La UD ganó a un rival directo en la primera jornada: el Mallorca

La tercera jornada enfrentaría al conjunto insular con uno de los cocos de Primera: el Valencia. Para más inri, el partido se disputó en Mestalla y terminó con un resultado muy estrecho a favor de los ches: 1-0 (diana lograda por el mítico David Albelda). Tal y como ha pasado este año, la UD parecía ofrecer una gran imagen ante rivales de entidad, a los que le costaba muchísimo perforar la portería defendida por Nacho González. La jornada cuatro, en la que se recibía al Málaga, colocó al plantel amarillo en la duodécima plaza tras el empate a cero cosechado; mientras que la jornada cinco nos volvió a desplazar hacia abajo, a la decimosexta posición, tras caer en casa del Betis con otro ajustado 1-0 (gol obra de Schürrer en propia puerta).

El gran triunfo de la temporada

La reconciliación con la afición del Insular llegó en el mítico estadio de la capital grancanaria una jornada después. El estadio se engalanó para recibir a un histórico del fútbol nacional en un partido que hizo vibrar al hincha local. El Real Madrid de Vicente Del Bosque llegaba a Gran Canaria con la clara misión de mejorar la imagen ofrecida en los primeros compases de la competición (solo había conseguido cinco puntos de dieciocho posibles). Sin embargo, el equipo insular le dio un baño de buen fútbol y efectividad cara a la portería que dejaría noqueado, y cuestionado, al equipo más laureado del fútbol nacional. Cuatro le endosó Las Palmas al Madrid, con el primer doblete de la carrera futbolística de Rubén Castro. Junto a él, Jorge de penalti y Pablo Lago perforaron la meta de Iker Casillas que, aquella noche del 3 de octubre, no pudo ser santificado.

A pesar de ello, en la jornada siete volvieron a situar al equipo en la cruda realidad. Fue en el Estadio de Zorrilla, en Valladolid, donde el equipo blanquivioleta ganó al amarillo por un gol a cero, obra de Turu Flores en los primeros compases del partido. Las Palmas no supo reaccionar y volvió a caer, por la mínima, ante uno de esos rivales llamados “directos”.

Un equipo que prometía tras las primeras siete jornadas

Con todo, el equipo de Fernando Vázquez había hecho, a estas alturas de competición, más puntos que el de Paco Herrera en esta temporada. También había encajado menos goles en contra: seis aquella última temporada por los nueve recibidos en esta. Y, además, el equipo de la temporada 2001/02 había anotado una diana más que el de la temporada actual (siete por seis). En definitiva, en la última temporada en Primera del conjunto amarillo, la del descenso, se había dado una mejor imagen que en esta de la vuelta a Primera.

La UD de Paco Herrera tiene peor bagaje anotador que la de Fernando Vázquez

Al igual que en aquel año, Las Palmas se ha enfrentado en la 2015/16 a equipos de talla, como el Atlético de Madrid, el Sevilla o el Barcelona. Se le podría sumar, por el buen inicio liguero que han tenido, a los chicos del Celta de Vigo. Y, también es cierto, que ha ganado un partido contra estos grandes rivales (por ahora, la única victoria amarilla en liga ante el Sevilla). Pero algo que no ha ocurrido este año es que la UD haya vencido a algún rival “directo” por el descenso: Levante, Eibar y Rayo Vallecano han sacado puntos del Gran Canaria que debiera ser un fortín este año.

Aquella temporada 2001/2002 no terminó de la mejor de las maneras para los intereses amarillos. En los siete primeros partidos de este curso futbolístico, el equipo de Paco Herrera ha conseguido un peor bagaje que aquella UD de Fernando Vázquez en sus siete primeros partidos. El respetable amarillo espera que esto solo sea un espejismo inicial y que no se cumplan los presagios tan negativos que nos deja aquel año 2002, el último del equipo amarillo en la máxima categoría del fútbol español.

Araujo increpa a un compañero en partido frente al Levante | Fotografía: laliga.es