Un mero trámite, eso es lo que se pudo ver en el Vicente Calderón esta tarde. A priori, se antojaba que podía ser así para los locales, lo raro es que desde el comienzo del partido, el Granada también se tomó el partido como un trámite, y se dejó llevar durante la mayor parte del encuentro.

Mínimo esfuerzo, máximo beneficio

El Atlético llegaba al choque tras una dura eliminatoria de Champions ante el Barcelona, de la que salió victorioso. Lejos de reservar jugadores, el "Cholo" Simeone salió con todo, para no dar lugar a sorpresas y conseguir tres puntos con los que meter presión al Barcelona en Liga. El posible cansancio de los jugadores debido a esta eliminatoria, no se notó en absoluto, quizás debido a la poca exigencia del partido, ante un Granada que no plantó cara salvo en algún momento puntual del encuentro.

Debido a las bajas en ataque que tenía el Granada, Success cumpliendo ciclo de amarillas y El Arabi por lesión, José González sorprendió con una alineación en la que destacaba el trivote formado por Krhin, Rubén Pérez y Docouré. Rochina y Cuenca ocuparon las bandas, y el controvertido venezolano, Adalberto Peñaranda fue el único atacante nazarí. El hecho de acumular gente en el centro del campo no le sirvió de mucho al Granada, que no consiguió tener el balón, por el contrario, cometió multitud de fallos que hacían que perdieran la posesión con extremada rapidez.

El Atlético se aprovechó de la pasividad que mostraban los jugadores visitantes para hacerse con el control del partido. El gol no tardó en llegar, al cuarto de hora se adelantaron los atléticos por medio de Koke. Un centro desde la izquierda de Lucas rematado por Torres, tocaba en un defensor del Granada y Koke fusilaba a Andrés Fernández dentro del área. No cambió el partido, que continuó desarrollándose de igual manera, hasta que un lanzamiento de Rochina a la media hora de partido que se estrelló en el palo, pareció desperezar a los granadinos, que hasta el final de la primera parte hicieron acto de presencia en el Calderón.

Koke abrió la lata ante un flojo Granada | Foto: ligabbva.com
Foto: ligabbva.com

Docouré y Rochina no bastaron

Esta pequeña reacción del conjunto nazarí se sustentó en dos jugadores. Un Doucouré impresionante, que parecía multiplicarse en el centro del campo y un Rochina que era el único aparte del francés que parecía darse cuenta de que estaban jugando un partido de fútbol. El atacante lo intentó en alguna ocasión más, sin suerte, y sin que Cuenca o Peñaranda acompañaran.

Tras el descanso, el Granada se vio obligado a cambiar al lateral derecho Miguel Lopes, lesionado, dando entrada en el terreno de juego a Foulquier. El Atlético tampoco tardó en mover el banquillo y el "Cholo" sacó a Ferreira Carrasco para introducir en el campo a Augusto y controlar aún más el encuentro. Al poco, el Atleti sentenció por medio de Torres. Esta vez fue Koke el que metió el balón entre lineas al delantero madrileño para que batiese por segunda vez la portería del Granada.

Este golpe puso punto final al partido, pese a quedar más de media hora para el pitido final. El Granada desapareció por completo y ambos equipos se dejaron llevar. Tanto Simeone como José González realizaron todos los cambios disponibles. En el Granada no tuvieron la más mínima incidencia. En el Atlético sin embargo, Correa sustituyó a un Griezmann muy discreto hoy, y el argentino fue el autor del tercer y último gol del encuentro tras una asistencia de Saúl que pilló totalmente despistada a la defensa granadina.

Se pudo ver hoy la gran diferencia que hay entre estos dos equipos, un Atlético que lucha por la Liga, frente a un Granada que lucha por no descender. Mucho tendrán que mejorar los andaluces de cara al decisivo encuentro que disputarán el próximo jueves ante el Levante si quieren sacar un resultado positivo.