El séptimo trofeo. No contento con el sextete que elevó a los altares más altos del reinado futbolístico al Barcelona de Pep Guardiola, el presidente Joan Laporta por aquel entonces catalogó como un título más la victoria que los blaugranas infligieron al Real Madrid en el Santiago Bernabéu aquel 2 de mayo del año 2009.
Siete años de un set para la historia. Una tarde inolvidable y el alirón virtual del que a la larga sería uno de los tres que llevarían al Barcelona a conseguir el primer triplete de su vida. Un triunfo que encumbró al debutante Guardiola en el fútbol de alto nivel. Messi de falso delantero, Iniesta y Xavi a los mandos y un Thierry Henry disputando la mejor tarde de su etapa blaugrana. Trotando con elegancia, como cual semental, sobre el verde de un Santiago Bernabéu que, si esta vez no aplaudió rendida como años antes frente a Ronaldinho, fue por el sonrojo de un fútbol excelente culminado tras una camiseta de muestra ante un resultado de escándalo: la de Gerard Piqué.
Aquel triunfo por dos goles a seis precedido de los aires de arrogancia del presidente en funciones blanco, Vicente Boluda, gestó el carisma de un Barcelona campeón que aún sigue latente en el equipo actual. De aquella tarde sólo Alves, Piqué, Iniesta y Lionel Messi siguen formando parte del once habitual del equipo que ahora dirige Luis Enrique, otro técnico que, tras el 0-4 de esta temporada ha dado un nuevo golpe de efecto en la "Casablanca".
Once años del primer gol de Messi ante el Albacete
Si famosa es la tarde del 2 de mayo de 2009 no menos lo es la del año 2005. Un Barcelona que volvía a liderar y campeonar en Liga daba su particular bienvenida a un joven jugador argentino que once años más tarde se convertiría en el mejor jugador de todos los tiempos. Una sucesión de rey a rey con el Albacete como testigo de lujo. Messi dijo aquí estoy yo.
Tras saltar a disputar los últimos minutos de aquel partido de Liga en el Camp Nou frente al conjunto manchego, Lionel Messi convertiría en oro una asistencia del "10" del momento en el Barcelona y en el fútbol mundial: Ronaldinho Gaúcho. Sería su segunda obra de la tarde, ambas picadas, y de las que sólo se recuerda una debido a que la primera había sido invalidada por el colegiado. Messi era especial por lo que, si hizo falta, el de Rosario repitió.
"Recuerdo con cariño que su primer gol fue tras un pase mío", señaló Ronaldinho en una entrevista del pasado al ser preguntado sobre el argentino. Mucho más que un pase de gol, un pase para la historia.