Una semana más el Levante vence y convence. Demuestra el porqué es el líder destacado de la Segunda División. Dos goles de Roger (su cuarto doblete de la temporada), que le sirve para convertirse en el pichichi de la categoría con nueve goles en su haber, y otro gol de Jason, certificaron la goleada granota ante el Mirandés y la primera derrota del conjunto local en su feudo. Si alguien parecía predestinado a ganar en Miranda del Ebro, ése tenía que ser el equipo granota. Y de qué manera lo hizo. Venía en racha, con cinco victorias en los seis últimos encuentros y pletórico de moral y confianza, pero el partido que se marcó en el Estadio Municipal de Anduva fue una exhibición de poderío casi de principio a fin. Posiblemente la victoria más convincente de la temporada. Otro golpe de autoridad.
A pesar del enésimo mensaje de prudencia de Muñiz, ya nadie tiene ninguna duda de que los azulgrana son los principales favoritos para volver a la máxima categoría del fútbol español. Es un equipo de Primera jugando en Segunda, y aunque quedan muchas jornadas, la sensación que desprende es que parece muy difícil que se desenganche del tren del ascenso. El técnico ha dado con la tecla, y la calidad de los jugadores hacen el resto. El reto estará en mantener la motivación adecuada en cada partido y no bajar la guardia. Y en ello están.
Inicio vibrante
El partido empezó de manera emocionante. Aún no se habían posicionado los equipos, cuando en el minuto dos Ávaro Bustos dispuso de una clara ocasión para inaugurar el marcador. Se encontró solo delante de Raúl Fernández, pero su disparo se fue muy alto. Casi a renglón seguido, después de unos primeros minutos de un cierto dominio local, Roger, en un exceso de generosidad, prefirió ceder el balón a Morales en vez de fusilar a Sergio Pérez. A partir de ahí, fue el Levante el que comenzó a generar peligro en campo contrario, sobre todo gracias a un hiperactivo Roger, que fue una auténtica pesadilla para la zaga rojilla. En menos de cinco minutos dispuso de hasta tres oportunidades de gol, que por diferentes circunstancias no pudo materializar. Primero se adelantó un defensor antes de que pudiera rematar. Al poco, intentó una volea casi de espaldas, pero su disparo salió flojo. La tercera fue un remate de cabeza a centro de Pedro López.
Carrusel de ocasiones
Pero a pesar del monólogo del delantero visitante, el Mirandés pudo adelantarse en el minuto 25, cuando Néstor empalmó un chut en la frontal del área que se fue arriba. Acto seguido, Jason avisó con un trallazo desde fuera del área al que respondió el meta local con una buena intervención. Antes de la media hora, la insistencia del nueve azulgrana tuvo por fin su premio al aprovechar un balón muerto en el área pequeña a la salida de un córner. El gol afectó a los locales, pero no se vinieron abajo. De hecho, reaccionaron y tuvieron una buena oportunidad de nuevo en las botas de Néstor, que hizo sudar a Raúl. El ex portero del Mirandés desvió el balón al poste tras una gran intervención. Y al poco, un tiro de Guarrotxena se fue lamiendo la madera. Muñiz no lo veía del todo claro, y decidió quitar a Abraham en el minuto 37 viendo el peligro que el equipo local llevaba por esa banda y a que estaba amonestado. La primera parte acabó con dos claras ocasiones de Morales en las que le faltó puntería. Al extremo se le sigue resistiendo el gol.
Consolidando el liderato
Tras el descanso, Terrazas movió el banquillo buscando el empate, metiendo munición con Fofo y Pedro Martín. Éste pudo llegar en el 56 por medio de un fuerte disparo lejano de Pau Cedrós, pero salió rozando la escuadra. Poco después, en el 63, Roger volvía a perforar las redes en una jugada muy parecida a la del primer gol, también tras un córner. Ahí se acabó el partido. Aunque el Mirandés se vino arriba en busca de la remontada, lo que se encontró fue una contra que aprovechó Jason (que suma y sigue) para cerrar definitivamente el partido en el 74. De ahí al final del encuentro, lo más reseñable fue la expulsión por doble amarilla de Cedrós. Con esta victoria, el Levante consolida el liderato, sacando seis puntos al segundo clasificado y nueve al tercero.