Los regalos de Navidad han llegado con unos días de adelanto al seno del CD Leganés. Jon Ander Serantes y el club pepinero han llegado a un acuerdo para ampliar el contrato del guardameta de Barakaldo hasta el año 2020. El compromiso se amplía tres años más respecto al anterior acuerdo, que tenía fecha de caducidad hasta junio del próximo año.
Deseo cumplido
La afición blanquiazul reclamaba de forma insistente que la secretaría técnica del Lega cerrase el acuerdo de renovación con el guardameta, y más cuando el jugador sufrió el infortunio de perderse toda la temporada tras una grave lesión sufrida en Cornellá. Su ampliación de contrato será una noticia que alegrará a todos: primero, al jugador, por su compromiso incuestionable con la entidad madrileña, y segundo, a unos aficionados que lo quieren como si fuese de su propia familia. Un jugador con gran parte de culpa de que el CD Leganés esté jugando en Primera División en la actual temporada, que hace una merecida pausa por la celebración de las fechas navideñas.
Uno más de la familia pepinera
Serantes recaló en Leganés en el año 2014. Inicialmente le costó esfuerzo y tesón ganarse el puesto en la portería en detrimento de Queco Piña; pero cuando lo hizo, fue el guardameta fijo e incuestionable; un profesional comprometido, un chico humilde y trabajador que peleó por hacerse un hueco en la alineación titular de Asier Garitano.
El club está de enhorabuena, porque Jon Ander regresará más fuerte física y anímicamente. Se espera que sea de nuevo en Primera División y significará que el CD Leganés habrá conseguido el hito de la salvación en la máxima categoría.
Sin duda, se cierra un año de dulce para los intereses de la entidad blanquiazul, cuidadora de sus estandartes plantilla por encima de cualquier otro interés. Jon Ander Serantes vivirá unas navidades más aliviadas porque será pepinero y para rato.