Eusebio Sacristán hará frente al último envite del 2017 con únicamente dos bajas en su plantilla, las de los laterales Kévin Rodrigues y Carlos Martínez.

Unas ausencias inesperadas – pues parecía que la enfermería de la Real Sociedad iba a quedarse sin pacientes por primera vez en la temporada – que se produjeron durante la sesión de entrenamiento de este pasado lunes 18 de diciembre y que les deja a los dos fuera de la convocatoria.

De este modo, y tal y como hacen llegar desde los servicios médicos del club, Kévin Rodrigues padece una dorsalgia aguda. Una afección en la zona dorsal que se suma a la lesión muscular en el bíceps crural izquierdo que sufrió en el último encuentro de la fase de grupos de la UEFA Europa League a principios de este mes de diciembre – ante el Zenit de San Petersburgo – y de la que acababa de recuperarse. Dos lesiones en apenas cuatro semanas que se unen a la que padeció a finales de octubre y que han acortado la progresión futbolística – esta campaña Rodrigues recibió su primera llamada con la selección absoluta de Portugal – y han impedido su presencia en el lateral derecho en los postreros compromisos de la Real Sociedad.

Por su parte, Carlos Martínez sufre molestias en la región inguinal izquierda. Una imprevista baja para el de Lodosa que, tras debutar este curso en Anoeta en el encuentro copero ante el Lleida Esportiu y sentarse en el banquillo ante el Málaga CF y el Athletic de Bilbao, parecía acariciar el final a un año de calvario tras romperse el ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha ante el Granada CF – justo en la jornada que precedía a la visita de los sevillistas – un 7 de diciembre de 2016.

Ambos carrileros se perderán el choque ante los de Berizzo y no será hasta el 2018 cuando vuelvan a pisar los terrenos de juego. Lo mismo que les sucede a Imanol Agirretxe y Jon Guridi, que si bien ya cuentan con el alta – tras sendas lesiones de larga duración –, Eusebio parece mimar sus retornos y los pospone hasta que acaben de tomar el tono físico de sus compañeros.