Este sábado el Girona visitará por primera vez en la primera división, al Fútbol Club Barcelona en el Camp Nou, un estadio donde varios miembros del Girona, tanto directivos como jugadores, han jugado como local. Dichos jugadores son los defensas Carles Planas y Marc Muniesa, el delantero recién llegado del filial azulgrana, Choco Lozano, y el trigésimo cuarto y actual presidente de la entidad, Delfí Geli.
Criados en Sant Joan Despí
Marc Muniesa y Carles Planas se podría decir que casi han nacido en Barcelona ya que ambos jugadores fueron adquiridos por la entidad azulgrana. Por parte del central zurdo, Muniesa, fue fichado por el Barcelona procedente del Penya Barcelonista, entidad de su ciudad, Lloret de Mar, donde jugaba de extremo, para después, ya con el conjunto azulgrana, fuera retrasado a la demarcación donde lo conocemos.
Marc llegó a La Masía a la corta edad de Benjamín, donde temporada a temporada iba sorprendiendo a sus respectivos entrenadores, hasta el punto de llegar a jugar en el juvenil A con tan solo 15 años. Muniesa debutó con el Barcelona el 23 de mayo de 2009 en un enfrentamiento en el Camp Nou contra el Osasuna. El jugador de entonces 18 años entró en el minuto 50; sin embargo, 32 minutos después, en el 82, el joven tuvo que retirarse después que el colegiado lo expulsara por roja directa. En ese encuentro, el Barcelona cayó por cero goles a uno.
Tras 81 partidos con el Barcelona B, el Stoke City, club que posee los derechos del jugador, le invitó a abandonar España en 2013. En Inglaterra permaneció hasta el pasado verano, donde jugó diez partidos en la última temporada defendiendo la camiseta del club inglés. Finalmente en 2017, tras el histórico ascenso del Girona FC en primera, el club catalán pidió su cesión y llegó a Montilivi cedido con opción a compra obligatoria si se consigue la permanencia.
En el caso de Carles Planas, el lateral izquierdo ha pasado por todas las categorías del plantel azulgrana, ascendiendo de nivel cada año hasta llegar al fútbol profesional de la mano de Luis Enrique en el Barcelona B de la temporada 2009. El oso consiguió su debut oficial en el primer equipo un 28 de noviembre de 2012, en un partido de Copa contra el Alavés. Planas abandonó la entidad azulgrana en 2014 tras finalizar su contrato con el Barcelona B, donde en la segunda división llegó a jugar más de cien partidos repartidos en cinco temporadas.
El destino del defensa catalán acabó siendo el Celta de Vigo. En las tres temporadas en Galicia, las lesiones le impidieron jugar más de 50 partidos con la zamarra celeste. Al finalizar contrato con el club vigués, el Girona se interesó en él y consiguió su contratación hasta 2020. De momento no está contando para Machín, el lateral izquierdo sigue sin adaptarse al carril, y Mojica y Aday, con más experiencia y confianza, han impedido a Planas jugar un solo partido de Liga como titular.
Un paso breve por la capital catalana
Es el caso del delantero hondureño, el Choco Lozano, el cual aterrizó en el Mini Estadi el pasado verano procedente del Tenerife por 1,25 millones de euros. En el conjunto dirigido por un exgerundense, Gerard López, no se consiguió sacarle el mismo provecho que logró en Tenerife, sin embargo, los 20 partidos juntamente con cuatro asistencias y cuatro goles, sumado al caché que se ganó con el conjunto canario, fue suficiente para que el Girona apostara por él, tras el ''No'' de Rochina. Sin duda el Barcelona se benefició claramente económicamente ya que el Girona pagó por Anthony Lozano una cantidad cercana a los 1,75 millones de euros juntamente con 450.000 en variables.
El paso de Geli por el Camp Nou
Para acabar, el actual presidente del Girona también cuenta com un pasado azulgrana. Delfí Geli militó en las filas del Barcelona en las temporadas 1989-1990 y 1990-1991; sin embargo, el defensa ya retirado, no pasó su mejor época en Barcelona, debido a que es más conocido por su paso por el Atlético de Madrid. Con el conjunto colchonero cuenta incluso con una placa en el paseo de Leyendas del Wanda Metropolitano.