Con las ideas claras llegó el equipo visitante a Santa Cruz, tenia una espina clavada desde la jornada nueve, cuando recibió en sus aposentos al Industrial, y el cual consiguió volver a Gijón con un punto tras empatar a cero. Casi cinco meses pasaron desde entonces, tiempo suficiente para afrontar este partido con ganas y garra, así lo demostraron finalmente, tan sólo le hicieron falta los tres primeros minutos para que se abriera el marcador, un tanto que anotaba Aser.
A un escaso minuto de que el árbitro anunciara el descanso, el Atlético de Lugones marcaba su segundo gol, haciéndoles ir al descanso con una ventaja cómoda, para afrontar la segunda parte del encuentro. Al comienzo de la segunda parte, el equipo local demostraba su valía, luchaba balones, buscaba marcar un tanto, el cual, no se hizo de rogar mucho, ya que, en el minuto 74, un penalti a favor, conseguía que a manos de Dani Peláez, llegara ese ansiado gol, recortando así las distancias con su rival. Pasaban los minutos en Santa Cruz, pero el Gijón Industrial no lograba su cometido, una lucha constante por llegar a la portería rival, frustrada en todo momento por la defensa y el portero del Lugones. 90 minutos más tarde, finalizaba el encuentro, los tres puntos se los llevó el equipo visitante con dos goles anotados.
El encuentro se saldó con un jugador visitante en la enfermería, Aser y un total de siete tarjetas, cuatro para los locales Dani Borreguero, Miguel, Hugo y Santi y las otras tres para los componentes del equipo visitante Hugo, Pablo Herrero y Marcos Norniella. Tras este partido, correspondiente a la jornada 28, el equipo de Gijón se coloca en el décimo tercer puesto de la jornada con 33 puntos y el Atlético de Lugones recorta distancia tras conseguir tres puntos, situándose en el número 17 con 26 puntos.
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