Levante y Getafe firmarían el comienzo de la mini-liga para la que el conjunto granota, había estado trabajando tras el duro reparto de puntos sufrido la jornada anterior ante el Espanyol. La ilusión y las ganas de hacer las cosas bien se plasmaban en el banquillo y con Paco López a los mandos, se vería a un equipo competitivo que intentaría aprovechar sus oportunidades en un escenario donde no se iba a regalar nada. 

El Levante mostró su experiencia en primera división en los primeros minutos del encuentro, tras un inicio donde el dominio fue totalmente del Getafe, el conjunto valenciano no bajó la cabeza a pesar de una ofensiva azulona casi imparable, que dejó ocasiones claras de Jorge Molina y el ex-jugador delantero del Levante, Ángel. El juego directo que planteó Bordalás causó que se dejasen espacios amplios entre líneas y el equipo valenciano estaba siendo víctima de las arrancadas hacia campo contrario del conjunto madrileño

Roger fue el protagonista de la tangana que se produjo en el minuto treinta y uno, el delantero sufrió un codazo que le dejó un corte en la frente por parte de un rival del conjunto azulón y esto fue motivo para que miembros del banquillo del Levante saltasen en su descontento a protestar al colegiado y que los jugadores se enfrentasen entre ellos entre empujones. Como se esperaba, el partido iba a ser una pugna, una guerra en la cual nadie iba a regalar nada, donde el fútbol parecía que se estaba dejando en segundo plano. La primera mitad del choque permitió ver una versión más defensiva del conjunto de Paco López, atenazado y un flato de confianza, pero todo estaba por decidir.  

La segunda mitad arrancaba con una nueva ocasión del Getafe para poder adelantarse en el marcador, pero nada cambió. La entrada de Boateng sirvió para intentar dar remate a los centros propiciados por los laterales Luna y Coke, ya que el Levante estaba encontrando a través de las bandas una oportunidad para desarrollar su juego en ataque. Con el cambió se buscó un juego más directo y que implicase pelea en el área contraria, lo cual lo estaba necesitando el Levante para acercarse a la portería de Guaita 

Con el paso de los minutos, el encuentro entró una dinámica de contundencia, donde se producirían constantes enfrentamientos personales entre los jugadores en las disputas de balón, fue tras esto cuando llegó la mejor ocasión del conjunto valenciano, tras un centro preciso de Ivi desde el córner, Róber Pier remató un balón que desgraciadamente chocó con la madera y la ventaja en el marcador tendría que esperar. 

Aún con el miedo en el cuerpo, el conjunto de Bordalás parecía que perdía el control. Las botas de Ivi iban a ser las encargadas de propiciar otro lanzamiento de córner que cambiaría completamente el rumbo del partido, Coke se encontró prácticamente solo en el área y empujó el balón al fondo de la red, de esta forma se inauguraría el marcador con un gol que cantó toda Valencia

A raíz de este gol, el partido se calentó aún más y el terreno de juego se convirtió en un campo de batalla, donde cada balón se peleaba a muerte. Una roja se añadiría a las múltiples amarillas mostradas y fue Raúl Fernández quien se tuvo que marchar a túnel de vestuarios desde el banquillo. Los nervios se apoderaron del conjunto azulón y el Levante aprovechó para gestionar los minutos, finalmente, no se repitió lo vivido las dos últimas jornadas y los tres puntos volvieron a Valencia quince jornadas después, una auténtica gesta futbolística de lucha, garra y pasión donde el conjunto granota ha conseguido los tres primeros puntos en su mini liga personal.