Tras varias semanas en las que Daniel Wass no ha podido entrenarse al mismo ritmo que el resto de sus compañeros, el lunes el danés volvió a la dinámica de grupo con buenas sensaciones. Una lesión en la espalda ha sido la culpable de que el jugador no pudiera entrar en los planes de Juan Carlos Unzué el último mes. Pero todo apunta a que se ha recuperado totalmente de la hernia discal que sufría, por lo que podría reaparecer en San Mamés, este fin de semana, ante el Athletic. El tratamiento conservador, las infiltraciones y el reposo al que ha sido sometido desde que detectaron su lesión parecen haber dado sus frutos.

Una baja sensible la que ha tenido el celta con Wass, ya que es uno de los pilares fundamentales en el centro del campo. Desde su llegada en verano de 2015, el danés se ha convertido en uno de los baluartes del equipo vigués, siendo titular con todos los entrenadores que han pasado por los banquillos de Balaídos.

Este año, formando con Lobotka y Radoja, se había convertido en el cerebro del equipo, el jugador que daba pausa o aceleraba el juego cuando era necesario, y el que surtía de balones a la delantera. Papel importante que también se refleja en sus números, con cuatro goles y siete asistencias esta temporada. Por lo que su baja ha sido muy importante y difícil de suplir para un equipo que, sin él, ha perdido solidez y regularidad.

Pero todo apunta a que el sábado se volverá a vestir de corto, será de la partida en un partido fundamental para las aspiraciones del equipo gallego. Los de Unzué se están jugando la clasificación para la próxima UEFA Europa League, por lo que tendrán que ganar en uno de los estadios históricos del fútbol español.