Por tercer año consecutivo, el Girona volverá a la ciudad deportiva del del Manchester City para alejarse de la insufrible calor veraniega de España y así mismo, aprovechar que el club citizen está de gira por los Estados Unidos, para preparar la próxima temporada en una de las mejores instalaciones del mundo.

Tras empezar la pretemporada en La Vinya, el nuevo centro de entrenamiento de la entidad gerundense, los pupilos de Eusebio Sacristán pasarán una de las semanas más intensas en las instalaciones de la City Football Academy, una ciudad deportiva que cuenta con un total de 33 hectáreas16 campos de entrenamiento, la cual costó alrededor de 200 millones de libras. Además de entrenarse sin descanso alguno, los jugadores rojiblancos se enfrentarán contra el Bolton Wanderers, equipo de la Championship, categoría que equivaldría a la segunda división española, y posteriormente se volverá a ver las caras con el Oldham Athletic, conjunto que milita en la cuarta división inglesa tras descender la temporada pasada y entidad con la que ya se enfrentó la temporada pasada el Girona, cuando este se preparaba para su debut en la primera división de la mano de Pablo Machín, ahora en el Sevilla FC.

Después de la estada en tierras inglesas, el Girona saldrá de Europa por primera vez en su historia para jugar el torneo Toyota Yaris La Liga World en la India. En el continente asiático, se enfrentarán contra el Kerala Blasters el 27 de julio y el Melbourne City el día siguiente.

Sin caras nuevas

Quique Cárcel, director deportivo del Girona, sigue trabajando día y noche para confeccionar la plantilla de la próxima campaña, sin embargo no se ha conseguido incorporar ninguna cara nueva. Se han hecho efectivas las opciones de compra que tenía sobre jugadores como Marc Muniesa o Johan Mojica, por los que la entidad catalana tuvo que desembolsar cerca de nueve millones de euros, cuatro al Stoke City y cinco al Rayo Vallecano. También se ha renovado la cesión, no de manera oficial aún, de Aleix García que con el cambio de entrenador, no ha visto con malos ojos seguir un año más en Montilivi. Además Sebas Coris, cedido al Osasuna la temporada pasada, y Rubén Alcaraz, cedido al Almería, se entrenan para intentar convencer al nuevo entrenador de volver al primer equipo, que con el ascenso la dirección deportiva decidió cederlos para que se consolidasen en la división de plata.

Apuesta por los jóvenes

Por otra parte, Eusebio Sacristán se llevará a los jugadores del filial al Marc Vito, Kévin Soni, Èric Montes, Yohan Andzouana y el juvenil Pedro Porro. Se quedan fuera el lateral izquierdo, Sergi Álamo, y el mediocentro surcoreano, Seung-Ho Paik, los dos por problemas físicos. Los cinco jugadores del Peralada-Girona B no sobrepasan los 22 años y son grandes promesas del club rojiblanco.

Pedro Porro el diamante en bruto del Girona

Porro se trata un extremo con mucho desborde, gol, técnica, buena visión del juego y buena compenetración con los compañeros, un jugador magnífico. Hace un año llegó del Rayo Vallecano después de rechazar una oferta del Real Madrid, esta temporada con el juvenil A, en la división de honor, ha marcado 15 goles y repartido 30 asistencias para ayudar al equipo entrenado por Àlex Marsal, a alcanzar la cuarta posición. Además, lo poco que ha jugado con el Peralada, solamente 88 minutos, ha sobrepuesto las expectativas, ya altas, que Chicho, entrenador del filial gerundense, tenía sobre él marcando tres goles, además siendo uno de estos escogido por la RFEF como el mejor de la Segunda División del grupo III. Además, ya ha debutado con el primer equipo, jugó unos minutos en la Copa del Rey ante el Levante. Esto ha provocado que equipos como Bayern de Múnich, Real Madrid o Barcelona hayan mostrado interés en el jugador extremeño considerado un diamante en bruto, quien ha tenido que renovarlo hasta tres veces en un año y subirle la cláusula a 5 millones de euros, para alejar cualquier interesado.