El pasado sábado el Granada CF consiguió ganar el derbi en el estadio más complicado de toda la liga: La Rosaleda. De hecho, hasta la fecha es el único conjunto que ha conseguido sacar algo positivo del feudo malaguista, pues anteriormente los ‘boquerones’ habían conseguido los tres puntos ante los rivales que habían pasado por allí esta temporada para intentar abandonar el Paseo de Martiricos con una victoria, aunque con más deseo que éxito. Para esta importantísima victoria, que deja a los de Diego Martínez a tan sólo dos puntos del liderato, fue clave una defensa magistral para destruir la construcción del juego ofensivo de los locales y asegurar así la primera derrota de los malagueños en su estadio. En este trabajo defensivo, destacó un hombre que se está desmarcando como el cerebro de este Granada y que, además, anotó el gol de la victoria. Efectivamente. Se trata de Ángel Montoro.

El centrocampista valenciano del conjunto rojiblanco aprovechó un despeje que llegó a la frontal del área para chutar a bote pronto con su pierna derecha un balón que se alojaría en las mallas blanquiazules tras golpear en el defensor Lacen. Un gol que vale tres puntos a domicilio y ante un rival directo por el ascenso como es el Málaga CF. No obstante, además de anotar el tanto, Montoro fue una pieza crucial en el engranaje de Diego Martínez a la hora de presionar la salida de balón junto a su compañero del doble pivote Fede San Emeterio y de empezar a construir el juego nazarí en el centro del campo.

Foto: Liga123
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Por otro lado, Ángel Montoro lleva bastantes jornadas siendo el elemento que hace funcionar el gran engranaje que es o, al menos, pretende ser este Granada CF. Un engranaje que apuesta por la posesión y la profundidad en el pase en determinadas ocasionas y en el balón largo y la carrera de los extremos, en otras. Otro rasgo esencial que el técnico vigués está inculcando en la filosofía de juego es la presión alta y el intento de recuperación tras pérdida de balón. Para esta manera de jugar al fútbol, Montoro resulta esencial en el esquema del conjunto granadino. De ahí que haya sido titular en todos los quince partidos de los dieciséis que llevamos de campeonato, quedándose en la grada tan sólo en la visita del CD Numancia al Nuevo Los Cármenes por acumulación de tarjetas amarillas.

Y en ese encuentro ante el CD Numancia, que acabó en empate sin goles, el Granada CF mostró señas de incapacidad precisamente en la creación del juego, dando una impresión de más atasco en la elaboración y en la conexión entre el centro del campo y la zona de ataque. Por este motivo, para intentar evitar este estado de inactividad ofensiva, Ángel Montoro supone el principal motor de este Granada CF. El valenciano suma un total de tres goles y cuatro asistencias, además de presentar un gran acierto en el pase, rondando el 80% de pases acertados en los más de mil minutos que ha disputado. Debido a este gran estado de forma y, sobre todo, mientras que se mantenga y se demuestre en el juego de los rojiblancos, tendremos a Ángel Montoro como fijo y principal referente de los de la ciudad de la Alhambra.

Foto: Liga123
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Sin embargo, actualmente el único factor que podría relegarlo a estar fuera del once inicial sería el mayor temor de cualquier deportista de élite: las lesiones. Y, es que, en el entrenamiento de hoy, martes 4 de diciembre, ha recibido una fuerte e involuntaria entrada en su tobillo, provocándole un esguince, por lo que, según los servicios médicos del club, necesitará fisioterapia. Dependiendo de su evolución, Diego Martínez podrá o no incluirlo en la convocatoria para el próximo partido del sábado, en el que el Granada CF visita al colista de la liga: el Gimnàstic de Tarragona SAD. Por el bien de los andaluces, mejor que evolucione positivamente. Aunque, por el bien de los catalanes, mejor que no. Es imposible que llueva a gusto de todos.