El próximo domingo, la Sociedad Deportiva Eibar visitará el Estadio Mestalla para medirse frente al Valencia Club de Fútbol, en marco de la jornada número 35. El presente de ambos conjuntos, irrumpe como una moneda de dos aristas. Por un lado, los murciélagos atraviesan un estado de forma sobresaliente ya que se encuentran en los puestos de vanguardia en La Liga, finalista de la Copa del Rey y semifinalista de la UEFA Europa League. Por otro lado, los armeros vienen de cuatro fechas sin conocer la victoria (un empate y tres derrotas) y sin la permanencia certificada. 

Valencianos y vascos, disputaron su último partido entre sí en la jornada 16 (15 de diciembre de 2018). En este cotejo, igualaron 1-1 con los tantos de Rodrigo (29') para el elenco ché y Charles (59') de penalti para los azulgranas. De esta manera, ambos representativos acumulan una racha de dos partidos (un año calendario) sin vencerse. Además de la última igualdad del presente curso, se registra otra de la temporada precedente que ocurrió en la jornada número 35 con empate 0-0 en Mestalla. En consecuencia, ambos conjuntos intentarán romper dicha estadística. 

Foto: Ernesto Aradilla-VAVEL-.
Foto: Ernesto Aradilla-VAVEL-.

Visitar el reducto blanquinegre trae recuerdos imborrables para el combinado vasco. Allí en Valencia, los de José Luis Mendilibar brindaron una exhibición durante la temporada 2016-2017 cuando bajo la estela de Adrián González y Pedro León, los azulgranas ganaron el pleito por 0-4. Por el contrario, también ocurrió una goleada por el mismo marcador en la temporada 2015-2016 a merced del Valencia. Vale recordar que, el historial entre ambos equipos esta igualado con tres victorias por bando y misma cantidad de igualdades.

Sin tiempo para lamentos

El Eibar tendrá que poner las barbas en remojo, pasar de hoja y olvidar rápidamente sus últimas producciones porque enfrente irrumpirá la figura de un equipo íntegro, competitivo y con sed de Champions League. A sabiendas de la jornada entre semana y el partido del último sábado, Mendilibar que cuenta con futbolistas lesionados, decidió dosificar para llegar con un once titular en la visita a Mestalla: Fabián Orellana, Joan Jordán, José Ángel y Sergi Enrich no fueron de la partida frente al Huesca. Esa decisión y los futbolistas lesionados (Arbilla, Ramis, Bigas, Peña) llevó al debut de Miguel Marí, quien ingresó para sustituir a  Pape Diop.

En contraposición, Marcelino García Toral, en una política diferente a la del entrenador armero, en su último partido alineó un equipo titular en su visita al Wanda Metropolitano. Claro está que, los presupuestos, objetivos y realidades de ambos conjuntos distan. Los murciélagos están pugnando por recuperar la confianza y transformarse en ese equipo que se metió en la conversación liguera del título, pudiendo participar en la Champions League. Los azulgranas, al contrario, presentan un propósito más ajustado a sus necesidades con la mente puesta en asegurar la permanencia de cara a la siguiente temporada. 

Foto: La Liga.
Foto: La Liga.

Un fiel reflejo de esta divergencia y acompañado de los eventos desafortunados (tres lesiones en una misma posición), fueron las diferentes dolencias que sufrieron Anaitz Arbilla, Iván Ramis y Pedro Bigas zagueros lesionados del Eibar como así también Rubén Peña en el lateral derecho. Estas circunstancias, obligaron al entrenador de Zaldívar a improvisar un zaguero (Sergio Álvarez centrocampista ubicado en la última línea) y un lateral derecho (Pablo de Blasis). Dichos inconvenientes no los ha sufrido Marcelino, puesto que cuenta con una plantilla más abultada y menor cantidad de futbolistas en la enfermería.

Dos entrenadores meticulosos

Tanto Marcelino como Mendilibar se caracterizan por darle una rúbrica a sus equipos. Bajo la norma de la intensidad, el buen trato de balón y sobre la base de equipos ofensivos, sus conjuntos han dado que hablar en La Liga. El historial de ambos no se circunscribe solamente al presente del Valencia o Eibar, sino que remontádonos atrás en el tiempo, García Toral hizo un papel protagónico en el Villarreal y Mendilibar efectuó lo propio en el Real Valladolid.

En cuanto a las similitudes, a los dos entrenadores les gustan los laterales con recorrido como Rubén Peña o José Luis Gayá, centrales en conducción y de buen juego aéreo como Ezequiel Garay e Iván Ramis, centrocampistas de buen manejo del esférico (Kondogbia, Jordán, Dani Parejo) y artilleros goleadores (Charles, Enrich, Santi Mina, etc.).  En este último punto se observa la divergencia. Por un lado Marcelino opta con atacantes de mayor movilidad, mientras que Mendilibar recurre a '9' puros más fuertes para recibir centros desde las bandas.