Han tenido que pasar cinco jornadas de Liga para que pudiésemos ver el Celta que tiene en mente Fran Escribá. Las lesiones de pretemporada, unida a un cierre de mercado con la competición ya iniciada, mermaron la capacidad de una plantilla que ilusiona tanto al cuerpo técnico, como a la directiva y al celtismo en general. Parece que el once estará formado por Rubén bajo palos; defensa para Mallo, Aidoo, Araujo y el uruguayo Lucas Olaza; medio para Okay, LobotkaRafinhaDenis Suárez; y punta de ataque para Santi Mina y Iago Aspas.

La portería tiene un dueño de la casa

Rubén Blanco siempre comenzaba los cursos como el emergente titular, si bien las lesiones minimizaron su rendimiento en el terreno de juego. Nadie dudaba de su calidad pero tantos problemas físicos a tan corta edad le tildaron de ser de "cristal". Pues parece que todas esas dudas se han esfumado. Seguro, jerárquico y concentrado, el guardameta está dando lecciones partido a partido de por qué en Príncipe se apuesta por la cantera para la portería. Atrás queda el fantasma de los fichajes en la portería. Hay tres porteros y todos tienen nivel para jugar.

Una pareja imbatida

El gran deber del Celta en la última década. No conceder goles de manera asidua. La llegada de Joseph Aidoo ha generado una reacción causa efecto en la línea defensiva. Es meramente anecdótico, pero la pareja que forma con el central mexicano Néstor Araujo no ha concedido ni un sólo gol en lo que llevamos de campeonato. El ghanés ofrece una seguridad que no se recuerda en la parroquia celeste y es el complemento ideal para un Araujo que, sin lugar a dudas, es el mejor central posicional de la plantilla.

La causa efecto es que además de mejorar la defensa, mejora el rendimiento de la portería, pues no se deja vendido al portero en tantas ocasiones. Además ofrece una seguridad extra para los laterales Hugo Mallo y Lucas Olaza para sumarse al ataque sin el temor a que le cojan la espalda. La historia marca grandes épocas en la zaga de los equipos y puede que el Celta esté comenzando una de ellas.

Un medio equilibrado que se transforma

Hasta ahora se había visto un 4-4-2 inmóvil, el esquema favorito de Escribá. La pareja formada por Beltrán y Lobotka ofrecía recorrido y trabajo para equilibrar los sistemas ofensivos y defensivos. Sin embargo, en el Wanda se pudo ver el regreso de Okay en el pivote defensivo. El turco, que llevaba 4 meses sin jugar, disputó un partido realmente completo, abarcando él solo toda la parcela defensiva del medio. Esto permitió modificar el esquema en transición ofensiva, dejando libertad de movimiento a Lobotka y permitiendo construir un medio del campo de tres hombres con Rafinha. En ese momento se pudo ver al Celta de posesión, al cual no le quemaba la pelota en uno de los estadios más complicados de La Liga. Ese desparpajo unido al buen hacer el conjunto celeste, es uno de los motivos de alegría de la afición. 

Por su lado Denis Suárez jugó de comodín. El de Salceda ocupó dos perfiles diferentes según la fase del partido. En defensa ocupaba una línea de cuatro por delante de Okay, junto a Rafinha, Lobotka y Santi Mina, y en ataque se escoraba en el perfil de extremo izquierdo, abriendo el juego y metiéndose hacia dentro buscando un pase interior.

La presión y el esfuerzo están repartidos

Para Iago Aspas este mercado ha sido fantástico. Se reencuentra con amigos, con compañeros ambiciosos como él que quieren llevar al Celta de Vigo a lo más alto. Y su compañero de batalla, Santi Mina, es de los que además quiere sentirse grande e importante en el verde. Su trabajo es de gran mérito, ofreciendo un despliegue físico y ayudando al de moaña en la presión y la generación de oportunidades. Aspas, acostumbrado a jugar con un delantero de referencia en la última época, se encuentra con un jugador intenso y asociativo que puede beneficiar todavía más su juego. 

Aunque aún no haya carburado el zarra es uno de esos jugadores que sin estar bien del todo suma. Y es que es normal que todavía no esté fino del todo, pues el esfuerzo de la pasada temporada para salvar al equipo le dejó sin batería. Ahora tiene gente alrededor que le quita presión y le libera de cargas

Y los que están sentados, podrían estar jugando

El año pasado había momentos en los que, estando el equipo agotado, se observaba el banquillo sin encontrar una solución viable que mantuviese el nivel. Pero los Brais, Beltrán, Sisto, Toro, Pape, Kevin...etc son jugadores que ya han demostrado en el incio liguero que pueden ser variantes y funcionales. Hay once, hay convocatoria y hay plantilla.