El primer tiempo en el Reale Arena estuvo muy entretenido. El Eibar comenzó bien el encuentro pero al minuto 5' el juego se detuvo. Tras un choque con Pedro León, Aritz Elustondo se quedó tendido en el terreno de juego y se lo tuvieron que llevar en camilla después de una aparatosa caída. Entraba al partido Le Normand que, a la postre, sería el autor de uno de los goles. A partir de ahí, la Real fue a más, con internadas de un Portu muy activo y movimientos interesantes de Odegaard, los txuriurdines empezaban a dominar el juego. Entonces, al minuto 24' los locales dispusieron de una falta lateral que botó Odegaard. El noruego metió un gran balón que remató Le Normand con un gran testarazo para adelantar a los txurirdin. El francés lograba su primer gol con la camiseta donostiarra.

A partir de ahí, la Real estaba más tranquila, jugando el balón desde atrás y pensando ya en el segundo gol. Y fue ahí donde ocurrió el empate. Zubeldia movía el balón al borde del área cuando dos jugadores del Eibar le presionaron. Recuperaron el balón y el esférico le llegó a Orellana que remató al palo, la jugada siguió y llegó Pape Diop desde atrás para hacer el 1-1 con un gran disparo. Seguidamente, se producieron dos goles anulados tanto a Real Sociedad como a Eibar para finalizar el primer tiempo.

Foto:// EFE
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Parecía que tras el descanso le iba a costar a la Real ya que el Eibar terminó mejor la primera parte, pero no fue así. 2 minutos después de la reanudación, Portu se fue por la banda, metió un buen centro al área que le cayó tras un toque de la defensa armera a Oyarzabal. El extremo gipuzcoano empalmó una gran volea rasa y cruzada para batir a Dmitrovic y adelantar a la Real de nuevo. No pasó mucho tiempo pues, cuando los locales hicieron el tercero. Al 58', Willian José, tras un centro que precedía de un rechace de un córner, aprovechó el desajuste defensivo del Eibar para hacer un nuevo gol que dejaba el partido muy de cara a la Real. 

Con eso, el encuentro se tranquilizó bastante y ya no ocurrieron tantas ocasiones, el Eibar tuvo algún que otro remate a portería pero sin demasiado peligro. La Real por su parte intentaba salir a la contra aunque sin llegar a estar encerrada atrás. Ya cuando quedaban 10 minutos para el final llegó el cuarto gol, obra de Odegaard. El noruego llevaba un partidazo y con un tiro desde el borde del área a la escuadra le puso la guinda al partido y a su vez lo calmó hasta su final. 4-1.

Este resultado deja a la Real en puestos Champions y en un momento maravilloso. Los de Imanol Alguacil han vuelto a ganar en casa, en un derbi gipuzcoano y dejando unas magníficas sensaciones. El próximo encuentro será en el José Zorilla ante el Real Valladolid.

Por su parte, el Eibar se queda hundido. Con 15 puntos y con la posibilidad de quedarse marcando el descenso a final de jornada, los de Mendilibar deben reaccionar ya tras un encuentro complicado. Los armeros compitieron en la primera parte pero se desconectaron en la segunda. Jugarán la próxima jornada en Ipurúa frente al Getafe.

La Real Sociedad hoy también tiene otro motivo para acabar el encuentro muy feliz. Y es que el césped ha estado óptimo y es algo muy beneficioso para su equipo como así afirmaba Imanol Alguacil: “Muy contento por el estado del campo, los jugadores lo han agradecido. Es una buena noticia”