El Real Betis volverá del parón navideño con un calendario plagado de encuentros frente a rivales del Norte de España. El primer choque será contra el Alavés en Mendizorroza el cinco de enero. Los blanquiazules se encuentran en una situación un tanto irregular en la tabla tras solo sumar 19 puntos en lo que va de Liga. El encuentro podría significar el distanciamiento de los de Rubi de la zona baja, o en cambio, permitiría a los locales recortar tres unidades a los verdiblancos en el último partido de la primera vuelta. Seis días después, tocará jugar la competición de su majestad el Rey el sábado 11 en Portugalete, un equipo original de Vizcaya. Tras estos dos enfrentamientos con equipos de 'arriba', será el turno de la Real Sociedad en el Benito Villamarín, sin duda una prueba de fuego para los sevillanos tras el fenomenal avance liguero del equipo txuri-urdin.

Sumando estos tres enfrentamientos contra equipos vascos, los andaluces se darán una mini tregua y realizarán una visita al Coliseum Alfonso Pérez para enfrentarse al todo poderoso equipo de Bordalás, que suma y sigue en su empeño de colocar al Getafe en un sitio privilegiado de la tabla. En la siguiente jornada seguirá con su ruta euskalduna enfrentándose al Eibar en Ipurúa, el dos de febrero a las 14:00 horas.

Sin duda un tramo bastante llamativo para los heliopolitanos, que intentarán sacar rédito ante unos rivales bastante complicados.

Historia ligada al País Vasco

El conjunto verdiblanco ha contado varias veces en sus filas con jugadores de origen vasco como Esnaola, Beñat o Roberto Ríos -entre muchos más-, en el que se encuentra también Eusebio. Varias de estas personalidades con pasado bético desearán de seguro la victoria de los andaluces, ese al que defendieron durante tanto tiempo, incluso en la única vez que el Betis ganó La Liga. El equipo de O’Connell fue conocido popularmente como 'el equipo de los vascos', tras contar en sus filas con varios futbolistas originarios de esa zona. Un toque muy importante en la historia del club.