La gran duda del mercado invernal en el CD Leganés puso punto y final el 1 de febrero cuando se cerró el periodo de fichajes. Finalmente, los blanquiazules cuentan en su plantilla con cuatro delanteros centros puros: dos los tenía ya antes de este mercado y dos los incorporó en el último día del mismo. Los nombres son Martin Braithwaite y Guido Carrillo (disponibles desde verano) y Roger Assalé y Miguel Ángel Guerrero (fichados en invierno). La alineación tipo del Leganés es la de 5-3-2 donde Braithwaite y En-Nesyri hacían una dupla ofensiva que hacía soñar al Municipal de Butarque. Tras la venta del jugador marroquí al Sevilla, Javier Aguirre se vio obligado a cambiar su alineación a un solo delantero con el objetivo de dar descanso a Martin y a Guido para que se fueran rotando.

Lo cierto es que el Leganés se ha movido bien dentro del mercado en el sentido que ahora cuenta con dos jugadores para cada perfil de delantero. Por un lado están Assalé y Braithwaite. Dos jugadores más llamados a caer en banda, a construir la jugada de ataque y a distribuir el balón al punta para que este finalice jugada. Se podrían considerar atacantes más creativos que ayudan a los 'killers' a que anoten los goles. Además el costamarfileño puede arrancar desde uno de los costados por lo que no sería descarado verle jugar en una alineación del Leganés con extremos.

En cuanto al otro perfil de delantero Carrillo y Guerrero son más rematadores puros. Presas de área dispuestas a pelear con las defensas rivales para hacerse con la posición y poder ayudar al equipo. Además, físicamente son parecidos por lo que debido a su altura tienen un potencial enorme en el juego aéreo. Si algún partido se complica, el Leganés tiene unos buenos cabeceadores para los últimos minutos de los partidos. Lo más probable es que Aguirre vuelva a pasar del 5-4-1 al 5-3-2 y combine a los dos tipos de delanteros. El sábado en el Ciutat de Valencia se verá cual ha sido la disposición final del técnico mejicano.