El Real Madrid juvenil conquista la Copa del Rey por segundo año consecutivo tras batir al Almería (2-1) en la final. Los goles de Pol Fortuny y Manuel Ángel dieron el triunfo al equipo del filial. Así suma la 15ª corona levantada en la historia de la competición.

Detrás de toda lección hay un maestro y en este caso ha sido Álvaro Arbeloa. El artífice de todo, comandando desde el banquillo blanco y desplegando su juego tal y como ha querido. Un estilo que se deja notar en Europa, especialmente llevando 35 partidos consecutivos sin perder y 31 victorias hasta el momento.

Si el técnico blanco sigue en esta trayectoria, poco le quedará para sumergirse al fútbol profesional, donde por ofertas no será: “Siento mucho orgullo por este equipo, no sé si alguna vez volveré a tener un grupo como este; el primer objetivo de la temporada está cumplido y estos muy contento”, dijo Arbeloa con los ojos puestos ahora en la competición liguera y europea, con la ilusión de completar el triplete.

Lo que resta de temporada

Arbeloa ha transmitido un mensaje positivo en el equipo, con jugadores que creen en el exmadridista como el líder ideal. Un espíritu que quieren mantener en el último tirón de la temporada y con los cuartos de final de la Youth League a la vista. Viajan a Holanda par verse las caras con el AZ Alkmaar, equipo que batió al FC Barcelona en los octavos de final.

Su equipo está plagado de estrellas jóvenes con mucho futuro, con jugadores que en unos años irán apareciendo en las grandes ligas. Jugadores como Gonzalo, Nico Paz, Jacobo, Por Fortuny, Manuel Ángel entre muchos otros, destacan por encima de todos sus rivales.