En una nueva cita europea, el Real Madrid no falló y aseguró una victoria más que los coloca como líderes en solitario del grupo C. Restando un partido por disputar, los blancos terminarán la fase de grupos en primera posición, mientras que su rival de hoy, el Nápoles, necesitará puntuar para ser segundos.
Al igual que sucedió en Italia, el Real Madrid comenzó por detrás en el mercador pero la calidad de los blancos terminaron superando este difícil comienzo. Continuando su increíble racha, Rodrygo respondió con un verdadero golazo para empatar el primer tanto de Giovanni Simeone. La jugada fue conducida por Brahim desde la mitad del campo, que se la dejó a Rodrygo para que se inventará un muy buen tanto.
Acompañando al brasileño, se destacaron tanto Brahim como sobre todo Jude Bellingham. El número cinco del Real Madrid volvió a hacer un completo partidazo y demostró que es un futbolista total, que físicamente es un superdotado y que con su inteligencia y técnica es capaz de sortear a cualquier rival.
La primera parte fue dominio Bellingham, y es que después del primer gol napolitano, el inglés fue el amo y señor del partido y marcó las diferencias en ataque. De nuevo acudió a su convocatoria con el gol, sumando ya cuatro goles en la actual temporada de Champions League.
Después de un final de primera parte en la que los locales se encontraban especialmente cómodos, llegó un tempranero gol de Zambo-Anguissa fruto de un fallo de concentración dentro del área. Con el empate a dos, el partido se estancó y es que ambos equipos se veían incapaces de encontrar portería.
En estos minutos en los que el encuentro frenó su ritmo, apareció la figura de Toni Kroos para manejar la posesión como solo él sabe. Fue el timón del Real Madrid durante todo el partido pero es que durante la segunda parte, el alemán sentó un clínic futbolístico en todos sus sentidos. Comenzaba las jugadas, movía el equipo, creaba espacios y estuvo contundente en defensa, robando muchos balones.
Gracias a este dominio, el Real Madrid se lanzó hacia la portería de Alex Meret y después de varias ocasiones perdonadas por Joselu, el joven canterano Nico Paz aparecía para meter un gol inolvidable para su carrera desde la frontal del área con su pierna zurda, logrando de nuevo la ventaja en el marcador.
En los últimos minutos del encuentro, Bellingham volvió a hacer una demostración de su exuberancia física, volvió locos a los defensores napolitanos y gracias a su incansables internadas, dejo en boca de gol a Joselu para que empujase un gran pase del inglés, sentenciando el partido y dejando un muy buen sabor de boca a todos los madridistas.
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Principales destacados del encuentro
Tanto Rodrygo como Bellingham están a un gran nivel y esto se está viendo reflejado en la cantidad de goles y asistencias que llevan combinados en los últimos cuatro partidos (once de los últimos quince goles). Por otra parte, Joselu no se le ve tan cómodo como a principio de temporada y aunque haya terminando metiendo, en el partido de hoy ha tenido dos o tres fallos que deberían haber sido gol. En la celebración de su gol pidió perdón a la grada por sus fallos.
Brahim y Ceballos fueron las grandes sorpresas del once debido a la baja de Modric, sin embargo el único que realmente la aprovechó fue el malagueño. Aportó mucho al ataque gracias a su intensidad en la presión y a su gran conducción pudo crear buenas oportunidades y espacios.
En cuanto a la defensa, estuvo algo más desconectada de lo normal, especialmente Alaba y Mendy debido a que por un fallo entre ellos se produjo el segundo gol del Nápoles. Rüdiger y Carvajal sin embargo tuvieron el ardúo trabajo de frenar a sus dos jugadores más determinantes, Kvaratskhelia y Osimhen.
Con esta victoria, el Real Madrid visitará Berlín con la tranquilidad de tener ya garantizado un boleto para los octavos de final y como primeros, después de realizar una gran fase de grupos con pleno de victorias.