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400 gracias, Fleury

Marc-Andre Fleury, uno de los mejores porteros de los últimos tiempos logró su victoria número 400.

400 gracias, Fleury
Fleury realizando una de sus fantásticas paradas | si.com
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Por Magí Chavarria

En el partido Philadephia Flyers versus Las Vegas Golden Knights que concluió en 2-3 en over time para los visitantes, Fleury consiguió alcanzar las cuatrocientas victorias en toda su carrera en la NHL, entrando así en el selecto grupo de doce porteros de toda la historia de la liga que han logrado esta increíble marca.

Con esa victoria, la franquicia de Nevada pone aún más campo de por medio entre ellos y San Jose Sharks para lograr la primera posición en la División Pacífica y ya son doce los puntos que separan estas dos franquicias.

Con el paso de los años, Fleury justifica con creces su elección nº 1 en el draft Este último partido fue un reflejo de lo que ha sido la carrera de Marc-Andre Fleury, tirándose el equipo a la espalda, demostrando (por enésima vez) sus reflejos y su sangre fría cuando sus compañeros más lo necesitaban y firmando un 'partidazo' en mayúsculas con 38 de los 40 tiros a su portería detenidos, o lo que es lo mismo, salvando el gol en el 95 por ciento de las ocasiones.

Además, Fleury es uno de esos jugadores que une al grupo y que siempre está de bueno humor, y con el paso de los años ha ido acumulando una experiencia que le ha venido muy bien a su equipo, pues siendo la primera temporada de su historia, necesitaban un líder como él.

Su equipo, Las Vegas; su casa, Pittsburgh

Este récord solo es un premio, un reconocimiento para un tipo excelente tanto dentro como fuera del hielo, que fue un pilar clave para lograr las tres últimas Stanley Cups en la franquicia de los Pittsburgh Penguins, sitio donde se le tiene como lo que es, una leyenda. Así quedó demostrado la última vez que los Golden Knigths visitaron el PPG Paints Arena de Pittsburgh. El momento más emotivo del partido fue cuando los video marcadores mostraron un video resumen de las trece campañas en Pensilvania y más de un aficionado, y el propio Marc-Andre, no pudieron contener las lágrimas de la emoción que supuso recordar todos estos años de gloria gracias a “The Flower”.