La gran Final de la Stanley Cup se presentaba en Washington con todo por decidir, uno a uno en el global de la serie, cogiendo el Capital One Arena el testimonio al T-Mobile Arena como recinto helado. La moral para los de D.C. se encontraba por las nubes y el portero Braden Holtby, después de su gran parada al final del anterior partido, estaba en boca de todos los fans de la NHL pero ni mucho menos los visitantes venían tocados, su choque no fue para olvidar y demostraron que querían continuar escribiendo la historia alrededor de la franquicia.
El choque daba comienzo, rápidamente Alex Ovechkin dispondría de una magnífica ocasión para adelantar a los locales pero la intervención magistral de Marc-Andre Fleury lo evitaría. A partir de ahí, varias oportunidades para modificar el resultado inicial se sucederían en ambas porterías, los Capitals verían como se les anulaba un gol por interferencia clara de Devante Smith-Pelly sobre Fleury, mientras que los Golden Knights enviarían dos disparos al poste. Primer periodo lleno de cargas y presión en toda la pista pero sin efectividad de cara al gol, cero a cero al término de los primeros viente minutos.
El segundo tercio de ponía en marcha, al cabo de poco los de Washington se adelantarían por mediación de Ovechkin, la estrella rusa rebañaría un puck suelto delante de la portería de Vegas para batir al meta visitante de reverso y poner el ansiado uno acero. Fleury mantenía a los de Nevada en el choque con intervenciones de mérito, aunque los Caps parecía que iban a una velocidad superior en cuanto al ataque se refiere. Los Golden Knights mantendrían un intenso forecheck en toda la pista pero de nuevo serían los de D.C. los que verían puerta, esta vez sería Evgeny Kuznetsov el encargado de marcar después de culminar una gran contra. Gran segundo acto de los Capitals, mucho más encertados y metidos en el encuentro, acabando con dos a cero después de 40 minutos.
En la que sería la última reanudación, Las Vegas conseguiría meterse de lleno en el choque tras marcar al poco de empezar el tercer tercio Tomas Nosek, el europeo aprovecharía un mal despeje de Braden Holtby para anotar. Con el partido de nuevo en un puño, los Capitals no aflojarían y continuarían jugando de forma más que notable, ganando las pequeñas batallas individuales a los Golden Knights. En una superioridad, T.J. Oshie enviaría la pastilla al poste (encuentro con muchos palos), no pudiendo apuntillar el choque con ello, aunque si que lo haría su compañero Devante Smith-Pelly unos minutos después, poniendo el que sería el definitivo tres a uno tras batir a Fleury. Vegas lo intentaría, incluso enviaría otro disco al poste pero con o sin guardameta no conseguirían acercarse más en el marcador. Finalmente triunfo muy trabajado de Washington, que le sirve para ponerse dos a uno en el global de la final.
Vegas abandonaba el Capital One Arena con una sensación de no haber sido capaz de dominar ninguna situación del juego, siendo la tarea de recuperación anímica por parte del entrenador Gerrard Gallant muy importante de cara al cuarto encuentro. Dicho choque se disputará de nuevo en la capital de los EE.UU. el próximo lunes, vital de cara a las aspiraciones de ambos equipos.