A más. Es la premisa de cualquier piloto, el punto en común de todos ellos, de seguir creciendo para dar lo mejor de sí mismos. Por eso, antes del parón vacacional, venidos de un gran premio, se pusieron manos a la obra para realizar una jornada de test en el Red Bull Ring, donde vendrán de vuelta el próximo 14 de agosto con motivo del GP de Austria. Rodar y rodar para que el estreno sea de altura.

Alzando el vuelo, aunque hayan quedado prohibidas sus alas, Ducati. Tan alto volaron que ocuparon las cuatro primeras posiciones, una de ellas a manos del mismísimo Stoner, para hacer todo más bonito. Ocurrió así el primer día y repitieron el segundo, para dejar claro que eso no era flor del momento. Si el martes Dovizioso fue el más rápido, intercambió el miércoles la posición con Iannone que firmó un crono medio segundo más rápido (1:23.240).

Foto: Ducati
Foto: Ducati

Tras ellos la estrella del test, Casey Stoner, que dio bien cuenta de su estado de forma y competitividad firmando el tercer puesto. Y quién sabe si podría haber sido mejor, pues venía lanzadísimo, con gomas nuevas y todo a su gusto, cuando sufrió una caída en la curva 7. Ahí queda la duda, la misma sobre la posibilidad de que lo veamos corriendo en un wild-card, descartado en Austria pero quién sabe si posible en Phillip Island. Y quien dio buena cuenta de sus posibilidades también fue Héctor Barberá. Viene de firmar una primera mitad de temporada brillante, séptimo precediendo justamente a las Ducati oficiales que dominaron los test, y aquí confirmó una vez más todo el potencial que es capaz de exprimir.

Así pues, la tiranía de Panigale fue más que evidente. Parte de su éxito, quizás, resida en las características de ese trazado que tan bien puede ajustarse a sus puntos fuertes. Siendo una pista de muchas aceleraciones y zonas de frenada, éstas pueden aprovechar toda su aceleración y la estabilidad que poseen en las segundas. Eso sí, en carrera se les sumará un  nuevo factor clave: el comportamiento de los neumáticos, aunque todos coincidieron que el 'grip' aquí no era problema.

Sin susto para Márquez; Yamaha tiene deberes

El circuito austríaco es un trazado corto, por lo que las nueve décimas que les saca el primero, Iannone, a las Yamaha de Rossi y Lorenzo, sexto y séptimo, bien pueden ser una cruz para la casa de los diapasones. "En ritmo perdemos medio segundo por vuelta y en vuelta rápida, a un solo giro, perdemos un poco más", declaraba el vigente campeón. Poniéndolo en perspectiva aún más preocupante es que Crutchlow, undécimo, esté a tan sólo tres décimas del tiempo de Rossi, un reto pequeño para Márquez que ya no sólo podría estar delante, sino dejar bien atrás a Yamaha con una Ducati de por medio.

Foto: Yamaha Racing
Foto: Yamaha Racing

Cabe recordar que los pilotos oficiales de Honda, Márquez y Pedrosa, no pudieron participar en los test tras el veto de Ducati, que fue quien alquiló la pista. Éstos tendrán que usar las referencias de LCR Honda y Marc VDS Racing. Por fortuna, ambos pudieron reconocer la pista en un evento promocional donde pudieron rodar durante dos horas con la moto de calle RC213V-S. Éstas fueron algunas de las declaraciones del de Cervera, líder de la categoría: "Algunas secciones me recuerdan a Austin, porque hay zonas de frenada fuertes. La mayor diferencia está en las subidas y bajadas. Pero también hay un par de curvas de 'stop and go', seguidas de zonas de mucha aceleración". Como se le dé igual que Austin, mucho deberán preocuparse sus rivales.

En cuanto a Suzuki, se mantuvieron en la línea. Acechando a la hegemonía, no haciendo mucho ruido pero encontrándose ahí, pegados. Hubo lugar, también, para el estreno de la KTM C16, que pudo disfrutar de su primera toma de contacto. En esas aguas se desenvolvió el test de Austria, aunque los resultados se confirmarán en su GP. Sólo esos son los que valen: Ducati ha dominado, pero Márquez, líder del Mundial, puede respirar tranquilo

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Sobre el autor
Esperanza Murcia
Amante del Motociclismo. Contándote el arte de las dos ruedas en Vavel.