Alex Rins se encuentra en una constante progresión desde su llegada al equipo Suzuki Ecstar. El piloto español tuvo su primera toma de contacto con la moto en los test oficiales de Valencia tras el último gran premio de la temporada 2016. Allí se cayó en su debut con la MotoGP, y como consecuencia de esta caída se dañó las vértebras T8 y T12, aún así, durante el invierno se recuperó y llegó a tiempo a los test de Sepang.
En el circuito malayo Rins consiguió el duodécimo mejor tiempo, pero con una progresión día tras día destacada: el primer día fue décimo octavo, a dos segundos de la cabeza; en la segunda jornada quedó en el puesto número trece, bajando su diferencia respecto al primer clasificado en 1.4 segundos; el tercer y último día consiguió mejorar un puesto en la clasificación y bajar su diferencia respecto al líder a menos de un segundo.
En Australia, se ha visto una actuación muy parecida del piloto de Suzuki: en la primera sesión lo encontramos décimo noveno a 1.9 del mejor tiempo; el segundo día fue noveno, a 0.9 segundos de Viñales; el último día ha sido definitivamente sexto, a tan solo medio segundo del tiempo marcado por Maverick Viñales, además en estas jornadas de entrenamientos oficiales ha sido más rápido que su compañero de equipo, Andrea Iannone, quien ha terminado en décimo tercera posición en la tabla combinada de tiempos de los tres días.
Rins también ha trabajado en el ritmo de carrera durante estos test, en los que ha estado un gran número de vueltas en en el tiempo de 1:30, sobre todo en la tercera y última jornada, en la que ha completado 66 vueltas y ha tenido una caída sin consecuencias físicas.
“La verdad es que estoy muy satisfecho con estos tres días de test. A parte de la mejor vuelta, lo más importante es que nuestro progreso durante las sesiones ha sido constante y significativo, acortando más de 2.3 segundos desde el primer día. Somos capaces de entender mejor la moto y además desarrollar con más sensibilidad la puesta a punto y los cambios”, ha comentado Rins tras acabar los entrenamientos en Australia.
“Con mi equipo, estamos trabajando intensamente, y al final nos vemos recompensados. Tenemos aún muchas áreas para mejorar, tanto en la GSX-RR como en mi pilotaje, pero nuestras ideas cada vez son más claras sesión tras sesión. También he tenido una pequeña caída hoy, pero no ha afectado a mi rendimiento. Estoy satisfecho con estos días y confiado en que seremos capaces de mejorar aún más”, ha concluido el piloto español.