La marcha de Jorge Lorenzo a Ducati, dejaba, a priori, a Valentino Rossi como la mayor arma de la marca japonesa, ya que el fichaje de Maverick Viñales aparecía como una apuesta de futuro, de medio a largo plazo, y no demasiado plausible de cara a la temporada 2017. Sin embargo, la pretemporada ha llegado, y con ella, la explosión de Maverick Viñales.
Pese a ser su primera toma de contacto real con la moto que lo acompañará a lo largo de este año 2017, Maverick Viñales no ha dejado indiferente a nadie en lo que llevamos de pretemporada, dejando matices de brillantez en los test iniciales en Sepang y acabando de despuntar en Australia. Si podrá estar peleando con los mejores todo el año aun está por ver – quedan todavía unos últimos test en Losail y la temporada tiene que tomar su curso – pero lo que está claro es que el piloto catalán no va a tener un papel secundario en este próximo campeonato que se aproxima.
Por lo que respecta a Valentino Rossi, el italiano terminó los test en Australia algo decepcionado. El de Yamaha no pudo lograr sus mejores registros en Phillip Island, y pese a que ha habido aspectos en los que se han podido apreciar trazos de esperanza, al italiano todavía le queda mucho margen de mejora.
Día 1: Todo sigue su curso
La primera jornada de test fue algo engañosa, ya que con respecto a los pilotos de Yamaha, nada se pareció a los resultados que cerraron las tres jornadas de pruebas en el trazado australiano. En este primer día, Valentino Rossi logró terminar en una más que destacable segunda posición por detrás tan solo de Marc Márquez. El italiano se quedó a menos de dos décimas del de Honda con su registro de 1:29.683. Esta posición, sin embargo, no reflejaba su rendimiento a lo largo de toda la jornada, ya que logró dicho registro en la penúltima vuelta del día en un giro inspirado que buscó el italiano para maquillar su actuación irregular, ya que este primer día había estado rodando entre los 1.31 y 1.30.
Por su parte, Maverick Viñales se tomó su primer día en Australia sobre la Yamaha con seriedad, terminando en un muy buen cuarto lugar teniendo en cuenta su primera toma de contacto con la nueva moto en un nuevo circuito. El catalán fue uno de los cuatro pilotos – junto con Márquez, Viñales y Crutchlow - que logró bajar al 1.29, en su caso quedándose a menos de medio segundo del registro impuesto por el vigente campeón del mundo. En su caso, esta marca llegó a mitad de la jornada tras dos vueltas muy buenas, aunque al igual que su compañero de equipo, su ritmo osciló también entre el 1.31 y el 1.30.
Día 2: Explosión de Viñales
El segundo día, fue el día que Maverick Viñales apareció para dar la sorpresa. Si muchos avecinaban que el catalán iba a estar arriba, nadie podía preveer el dominio que el nuevo en Yamaha exhibiría. Casi medio segundo más veloz que Marc Márquez, Viñales cerró la segunda jornada con un espectacular 1.28.847, siendo el único piloto en toda la parrilla capaz de bajar a esa cifra. Y su tiempo no fue casualidad: lo logró en su giro 21 tras encadenar tres vueltas consecutivas rodando en esos tiempos. El resto de la jornada siguió balanceándose en los 1.30 aunque a mitad de la sesión logró volver a encadenar cuatro 1.29, demostrando que tenía madera para sacar ritmo.
Por el contrario, la jornada de Valentino Rossi fue mucho más complicada. El italiano rebajó en menos de una centésima el registro que había plantado el día anterior, en esta ocasión logrando un run positivo de cinco vueltas rondando en las cifras del 1.29. El 46 explicó tras esa jornada que tanto él como su equipo habían tomado la dirección equivocada para seguir desarrollando la puesta a punto, hecho que lo hizo retrasarse hasta la octava posición con su 1.29.674.
Día 3: Polos opuestos a ambos lados del box
La última jornada fue agridulce para la marca japonesa. Mientras que Viñales siguió en lo más alto, Valentino Rossi cayó todavía más que el día anterior, quedándose fuera incluso del Top10. Para Viñales las cosas siguieron yendo viento en popa. Marcando un gran registro a primera hora – en la vuelta 13 con un 1’28.549 – para asegurarse prácticamente el primer lugar, el catalán se dedicó a acabar de pulir pequeños aspectos en su Yamaha. Dicha tranquilidad le permitió al ex de Suzuki realizar un simulacro de carrera que tampoco le fue nada mal. De 21 vueltas, 16 las logró realizar bajo 1.29, pudiendo marcharse de Australia con una tranquilidad relativa.
Por el contrario, Rossi siguió en su pesadilla particular. Menos de dos décimas respecto a la jornada anterior pudo rebajar el piloto italiano, que vio como su compañero de box se quedaba a casi un segundo. Apenas tres vueltas logró Rossi realizar en 1.29, observando muchos problemas y también impidiéndole realizar un simulacro de carrera. El italiano abandonó Australia con tan sólo 52 giros en esa última jornada y con mucho trabajo pendiente en Qatar.
| Piloto | Día1 | Día 2 | Día 3 | Progresión |
| Maverick Viñales | 1'29.989 | 1'28.847 | 1'28.549 | - 1'440 |
| Valentino Rossi | 1'29.083 | 1'29.674 | 2'29.674 | - 0'213 |
Folger da la sorpresa en la satélite
Por lo que respecta a las Yamaha satélite, los dos debutantes en la categoría tuvieron actuaciones dispares. Sin duda, la sorpresa la dio Jonas Folger con su 1.29.042 en la última sesión que le permitió terminar en un más que notable cuarto puesto. Por el contrario, a Johann Zarco le está costando algo más adaptarse a la nueva categoría, terminando los test en Phillip Island el decimocuarto.