Golpe de autoridad alemán, sí, no es casualidad. Y tampoco fue casualidad que Ferrari se impusiese a Mercedes de nuevo como ya hiciese en Melbourne. Sebastian Vettel se llevó la victoria ante una pobre carrera de Lewis Hamilton y sobre todo, de Valtteri Bottas, muy condicionado por su pésimo ritmo de carrera. Los italianos superaron otra vez a los de Brackley en la estrategia, que no supieron leer entre líneas la estrategia marcada por Ferrari ni su gran trabajo. Los de Maranello demostraron que no solo con talento se ganan carreras.

El Gran Premio ya comenzaba de la peor manera posible para McLaren. Vandoorne fue en este caso quien pagó los platos rotos de la nula fiabilidad del motor Honda. El belga ni siquiera salió a dar vuelta de formación al no poder arrancar su monoplaza y por supuesto al escaso tiempo de los mecánicos para solventar los problemas de la unidad de potencia.

Salida del Gran Premio de Bahrein, Foto: @redbullracing
Salida del Gran Premio de Bahrein, Foto: @redbullracing

La salida, siempre determinante en una carrera de esta índole, se saldó sin incidentes entre los pilotos, aunque volvió a ser el talón de Aquiles de Lewis Hamilton. El británico perdió la posición con respecto a Sebastian Vettel, aunque mantenía la estela con el piloto de Ferrari y Valtteri Bottas. Los dos pilotos de Mercedes y Vettel, junto con Ricciardo y Raikkonen en cuarta y quinta posición, rodaban en los mismos tiempos y las distancias apenas llegaban al segundo. Por detrás, Carlos Sainz firmaba una gran actuación remontando hasta la undécima posición, mientras que Fernando Alonso mantenía el tipo ante los dos Sauber.

Transcurridas las primeras vueltas de la carrera, se acumulaban los accidentes que determinarían por completo el transcurso de la carrera. Los problemas de fiabilidad en un circuito que castiga los frenos y los motores han sido decisivos cuanto menos. Todo comenzó con el abandono de Kevin Magnussen por problemas de motor en la octava vuelta. Varias vueltas después, en plena lucha entre Vettel y Valtteri Bottas por hacerse con la primera posición,  el germano optó por entrar temprano a boxes con la intención de realizar un undercut sobre Valtteri Bottas para aguantar la posición. La jugada le salió de fábula al alemán ante la sucesión de abandonos que condenó a Mercedes a meter a sus dos pilotos a cambiar neumáticos con el Safety Car en pista.

Ante el alboroto formado en el pit lane con tantos pilotos entrando a hacer sus primeros pit-stops, Max Verstappen desencadenó el primer abandono formado en el primer cuarto de hora de carrera. El holandés, sin frenos, acabó chocando contra la protección y su bólido, con el alerón delantero roto, se quedó anclado en la grava, sin opciones de volver a la carrera.

Acto seguido, Carlos Sainz, que había realizado su primera parada en la vuelta 14, se vio obligado a abandonar después de sufrir un choque con Lance Stroll, que venía lanzado y con problemas de motor. El madrileño abandonaba por primera vez esta temporada por culpa del choque con el piloto de Williams, certificando así un fin de semana nefasto para sus intereses. Tal era su cabreo que en la conversación por radio con sus ingenieros explotó de ira ante el choque con Stroll; “¡Me ha golpeado el p*** Stroll!” exclamaba Carlos, que después de firmar una gran salida, se vio obligado a retirarse de la carrera.

Lewis Hamilton y Valtteri Bottas, a la caza de Sebastian Vettel, Foto: Zimbio
Lewis Hamilton y Valtteri Bottas, a la caza de Sebastian Vettel, Foto: Zimbio

Relanzada la carrera una vez terminado el caos, Sebastian Vettel aumentó la distancia con respecto a Bottas y Hamilton. El finlandés de Mercedes acusaba problemas en la parte trasera de su monoplaza y se vio obligado a dejar adelantar al británico, al que la salida y el Safety Car del inicio le condenaron por completo en su intento de dar caza al tetracampeón del mundo. En los puestos de atrás, durante el ecuador de la carrera se veía una lucha muy amena entre Fernando Alonso junto con Kvyat y Palmer. El asturiano, que adolecía de falta de potencia en su motor, pudo disfrutar durante varias vueltas de la posibilidad de luchar por la duodécima posición con el ruso y el inglés.

Aun completando la carrera, fue una carrera infernal para el español ante la falta de potencia de su motor, nuevo por la rotura del motor que utilizó en la sesión clasificatoria.  Ante la sanción de Lewis Hamilton de cinco segundos por obstaculizar a Ricciardo en su primera parada y la distancia obtenida en la reanudación de la carrera, Sebastian Vettel sentenciaría su segunda victoria en su segunda parada, con un mundo de diferencia sobre sus perseguidores. Hamilton aseguró el segundo puesto a 10 vueltas para el final en una carrera en la que Red Bull volvió a estar desparecido y con problemas para plantar cara a Ferrari.

Kimi Raikkonen le ganó la partida a Daniel Ricciardo, y cabe destacar el gran trabajo realizado por Force India en la carrera. Después de una sesión de clasificación funesta en la que Checo Pérez se quedó fuera a las primeras de cambio y Esteban Ocon se quedó fuera, ambos finalizaron en la zona de puntos. El mexicano firmó una remontada de película firmando un séptimo puesto, mientras que Ocon terminó en décima posición.

Fernando Alonso, abandonando a falta de una vuelta, Foto: @McLarenF1
Fernando Alonso, abandonando a falta de una vuelta, Foto: @McLarenF1

Si antes hablábamos de los problemas de fiabilidad que sufría Vandoorne y que le impedían disputar la carrera, Fernando Alonso abandonó de nuevo, por tercera vez consecutiva, por problemas de motor. El asturiano se metió en su box a falta de una vuelta para finalizar la carrera, sumando un fin de semana negro más para McLaren (a falta de los que vengan).

Victoria merecida para Sebastian Vettel que confirman a Ferrari como un rival serio para Mercedes y como firme candidato al título mundial. Lewis Hamilton finalizó segundo y Valtteri Bottas, tercero, en una carrera en la que Mercedes fue superada con creces en la estrategia por Ferrari y en la que la salida y el Safety Car de la vuelta 15 fueron determinantes para que el alemán se llevase el gato al agua. Abandono prematuro de Sainz que le prohibió de realizar una buena carrera y un nuevo fracaso de McLaren, a quienes les espera una larga travesía por el infierno esta temporada.